
Asunción, 21 may (EFE).- La Cámara de Diputados de Paraguay aprobó hoy por casi unanimidad expropiar 14.404 hectáreas de tierra en favor de la comunidad indígena Sawhoyamaxa, que fue expulsada de allí hace más de 20 años por un empresario alemán.
El proyecto de ley, que ya contaba con la aprobación en el Senado, pretende cumplir con una sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que Paraguay (CorteIDH) arrastra en su contra desde 2006.
Tras la ratificación en la Cámara baja, la propuesta legislativa se traslada al presidente de Paraguay, Horacio Cartes, que puede suscribirla o vetarla.
Es la primera vez que el Estado paraguayo pretende restituir las tierras de una comunidad indígena a través de una expropiación, según la ONG Tierraviva, que ha apoyado a los Sawhoyamaxa durante el proceso.
El proyecto, presentado el último día de su mandato por el anterior presidente, el liberal Federico Franco, salió adelante con los votos de la oposición y de la mayor parte de los diputados del gobernante Partido Colorado.
La votación fue a mano alzada y el Congreso aun no ha divulgado un cómputo oficial de los votos.
Al comienzo de la sesión el diputado colorado Bernardo Villalba pidió postergar por 30 días el tratamiento de la expropiación, con el argumento de que el Estado no tiene previsto en su presupuesto el pago por esas tierras.
Pero los legisladores opositores, junto a un grupo del Partido Colorado, impidieron el aplazamiento.
En 2006 la CorteIDH sentenció que antes de tres años el Estado paraguayo debía restituir esas tierras, en manos de Heribert Roedel, condenado en su país en la década de 1980 por estafar a inversores alemanes con un esquema de venta fraudulenta de tierras en Paraguay.
Según la ONG Tierraviva, el Estado Paraguayo es el único en toda la región que tiene en su contra tres sentencias incumplidas de la CorteIDH en materia territorial indígena.