España fue uno de los países con el mayor promedio para de prisión en 2011 (4 º), entre los países para los cuales se dispone de datos. Las tres primeras posiciones del ranking se estaban ocupadas por Turquía (45 meses), Rumanía (28,3 meses) y Portugal (23,3 meses), aunque los datos en bruto de Turquía utilizados para el cálculo no son fiables, según un informe del Consejo de Europa.
En general, la población carcelaria disminuyó un 5,6 por ciento entre 2011 y 2012. Esta cifra es similar a la de Turquía (-6,4 por ciento) y Suecia (-5,3 por ciento). La población carcelaria disminuyó un 3,7 por ciento entre 2009 y 2010 y del 3,3 por ciento entre 2010 y 2011. En el período 2003-2012, la población carcelaria aumentó 11,1 por ciento.
Duración media de prisión
La duración media de la prisión en España era de 19,1 meses, dos veces más alta que la media europea y 2,5 veces superior a la media europea. La media europea fue de 9,5 meses y la mediana de 7,3 meses europeas.
También, España fue uno de los países con la mayor población penitenciaria femenina en el número total de reclusos (7,6 por ciento) en 2012. La media europea es de 5,4 y el europeo medio 5,0. Sólo 4 de los 47 países tienen una mayor proporción de mujeres en el número total de reclusos: Mónaco (22,0 por ciento), Andorra (17,1 por ciento), Islandia (8,6 por ciento) y Rusia (8,2 por ciento).
Nuestro país tiene una de la más alta proporción de presos condenados por "robo", entre todos los Estados miembros del Consejo de Europa para el que hay datos disponibles. Sólo Bulgaria y Letonia tuvieron una mayor proporción de reclusos condenados por robo (47,9 por ciento y 31,1 por ciento respectivamente).
El 30,7 por ciento de todos los reclusos condenados en España fueron presos condenados por ?robo?, mientras que la media europea es de 12,9 y la mediana es de 12,5, lo que hace que la figura española dos veces superior a la europea. Por "robo" es la categoría principal en cuanto a la " ofensiva de los presos condenados ", mientras que en Europa es el cuarto (tercero de acuerdo a la mediana europea).
Entradas en las instituciones
En 2011, España tenía una de las tasas más bajas de las entradas en las instituciones penales. Por cada 100.000 habitantes había sólo 96,3 entradas. Este indicador es dos veces inferior a la media europea (206,8).
Los Estados europeos no logran reducir significativamente el hacinamiento en las prisiones a pesar del creciente número de delincuentes supervisados ​​por agencias de libertad condicional, de acuerdo con el Consejo de Europa Estadísticas Penales Anuales (conocido como el I y Space Space informes II), que se publica hoy 2012.
Entre 2011 y 2012, el número de presos detenidos en las cárceles de Europa cayó 99,5 a 98 presos por cada 100 plazas disponibles. A pesar de una reducción de cerca de 90.000 individuos en la población penitenciaria (una disminución del 5 por ciento a partir de 1.825.000 en 2011 a 1.737.000 en 2012), el hacinamiento sigue siendo un problema grave en 21 administraciones penitenciarias en toda Europa. Serbia, Italia, Chipre, Hungría y Bélgica siguen siendo los estados donde la situación era más grave.
Promedio de reclusos que cumplen condenas
Los informes concluyen que los órganos judiciales son a menudo emitiendo penas privativas de libertad muy cortas, lo que significa que, en promedio, 20 por ciento de los reclusos cumplen condenas de menos de un año. Aunque hay un aumento significativo en el número de personas bajo la supervisión o el cuidado de los servicios de libertad condicional (un 13,6 por ciento de 2011 a 2012, y del 29,6 por ciento desde 2010), muchos países a menudo no son suficientes introduciendo alternativas a la prisión, y rara vez se utilizan éstos para sustituir la prisión preventiva: sólo el 7 por ciento de los acusados ​​en espera de juicio se colocaron bajo la supervisión de los servicios de libertad condicional.
El Comité Europeo de Ministros y otros órganos, como el Comité para la Prevención de la Tortura (CPT) ha recomendado a los Estados miembros que aborden el problema del hacinamiento vigorosamente y aumentar las posibilidades de reinserción de los delincuentes. Recordando que la privación de libertad debe ser una sanción de último recurso, al que han llamado a los gobiernos a hacer el mayor uso posible de alternativas a las sanciones privativas de libertad, como los servicios de libertad condicional, la comunidad, las órdenes de tratamiento o restricciones de la libertad de movimiento por medio de toque de queda órdenes o monitoreo electrónico.
El robo (20 por ciento) y el tráfico de drogas (17 por ciento) siguen siendo los delitos más comunes por los que los presos habían sido condenados a penas de prisión. 13 por ciento de los internos estaban detenidos por homicidio.
En 2011, el monto promedio diario por recluso se incrementó a 103 euros, frente a los 93 euros en 2010. Sin embargo, existen grandes disparidades entre los países, aquellos con los gastos más altos en general, siendo los que tienen las poblaciones carcelarias más pequeños.