Madrid, 15 abr (EFE).- La Policía Nacional ha desarticulado, con la detención de siete personas, un grupo organizado que utilizaba el método delictivo de la "siembra" para apoderarse de tarjetas de crédito con las que habrían conseguido más de 160.000 euros.
Según ha informado hoy la Jefatura Superior de Policía de Madrid, las víctimas eran personas de edad avanzada a las que distraían lanzando al suelo junto a ellos un billete de 20 euros, que es en lo que consiste la "siembra".
Con las tarjetas sustraídas sacaban cantidades que oscilaban entre los 5.000 y los 11.000 euros.
Desde noviembre del año pasado se han contabilizado un total de 109 perjudicados y la cantidad defraudada asciende a 163.000 euros, que han conseguido ser recuperados en buena parte.
La investigación comenzó el pasado mes de noviembre cuando se tuvo conocimiento de la existencia de una organización cuyos miembros eran responsables de una serie de estafas en Madrid.
La banda siempre actuaba en grupo y en la misma entidad bancaria y, para practicar su "siembra", los estafadores primero seleccionaban a una víctima que estuviera extrayendo efectivo en un cajero automático.
A continuación, uno de los miembros de la trama visualizaba y memorizaba el número pin introducido.
Posteriormente, los demás componentes del grupo llamaban la atención de la víctima arrojando al suelo un billete de 20 euros al lado contrario de la ranura por donde debería salir la tarjeta.
La distracción era suficiente para intercambiar la tarjeta que acababa de ser expulsada por otra idéntica previamente sustraída a otra víctima.
El resto de integrantes de la organización realizaban funciones de vigilancia para evitar ser detectados por otros usuarios del banco o por la policía.
Los ahora arrestados solían ir muy arreglados y eran educados con las víctimas para que no sospecharan de ellos.
Con este método, los estafadores llegaron en ocasiones a agotar el saldo de varias cuentas corrientes, sustrayendo todos los ahorros de las víctimas.
Tras varias pesquisas se logró identificar y detener a los siete integrantes de la banda, todos de origen rumano y de entre 28 y 35 años.
Todos cuentan con antecedentes policiales por hechos similares, según ha precisado la Jefatura.
Las investigaciones han sido llevadas a cabo por parte de agentes de la Comisaría de Ciudad Lineal, pertenecientes a la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
