Vicente José Gil Blay, hijo de Vicente Gil Usedo, empresario jubilado imputado en el conocido como 'caso Emarsa', ha defendido ante el juez que desconocía la procedencia del dinero que le ingresaba Jorge Ignacio Roca, actualmente en paradero desconocido, en unas cuentas de Andorra y que luego le devolvía junto a una comisión de un dos por ciento.
VALENCIA, 5 (EUROPA PRESS)
Gil Blay se ha pronunciado de esta forma en su declaración, en calidad de imputado, en el juzgado de Instrucción número 15 de Valencia, encargado de investigar un agujero económico, de al menos 25 millones de euros, en la gestión de la depuradora de Pinedo, dentro del 'caso Emarsa'. El interrogatorio ha tenido lugar este martes.
La versión que ha ofrecido Gil Blay es muy similar a la que aportó este lunes su padre, Vicente. Ambos han reconocido ante el juez que tenían cuentas en Andorra para ingresar el dinero en 'B', que luego utilizaban para pagar facturar a sus proveedores, todos ellos localizados en China. Esto lo hacían a través de sus dos empresas: Abanicos Gil y Blas S.L. y Creaciones Coscollar.
Gil Blay, al igual que su padre, han negado cualquier negocio con Roca, aunque han indicado que llegaron a un acuerdo por el que éste les hacía ingresos en sus cuentas de Andorra, que luego cobraba en las fábricas de Valencia junto a una comisión de un dos por ciento.
Sobre la cantidad que Roca ingresaba en sus cuentas, tras requerírselo, ha aseverado que desconocía su procedencia. Entre el 1 de octubre de 2009 y el 28 de abril de 2010, éste ingresó 690.108,50 euros procedentes de la cuenta de una de sus empresas Hesse Darmastadt. Ha defendido que nunca se planteó de donde procedía el dinero que le ingresaba.
UNA CENA CON SU "PEÑA"
El hijo, licenciado en Farmacia, ha explicado que conoció a Roca en una cena en la que estaba con su "peña", de la que formaban parte, entre otros, los imputados José Luis Sena Gimeno, Vicente Ros, y Enrique Sena, todos ellos vinculados a la firma Notec. También conocía a Vicenta Fortuny por ser la mujer de Vicente Ros.
"No me lo presentó nadie, sino que se sentó a mi lado en la mesa y estuvimos hablando y me dijo que se dedicaba a operaciones y negocios internacionales. Me dijo que tenía una inmobiliaria en el sur de Francia y me comentó que tenía una empresa en Andorra, y yo le dije que me dedicaba a la importación y la distribución y estuvimos hablando, nos dimos los teléfonos, y estuvimos tomando unas copas y ya está", ha relatado.
Tras esta charla, ha explicado que Roca empezó a proponerle "algunos negocios", y ha dicho que le llamaba por teléfono. Por este motivo, llamó a José Luis Sena y le comenté lo que ocurría, y éste le respondió que Roca se dedicaba a hacer negocios. "Y estuve comentando algunos negocios con él, pero al final no hice nada", ha aseverado.