
Rabat, 21 feb (EFE).- Dos organizaciones marroquíes pro derechos humanos criticaron las deficiencias observadas en el reciente juicio militar a 24 independentistas saharauis, 22 de los cuales fueron condenados a penas de entre 20 años y perpetuidad.
En dos actos distintos convocados para valorar las condiciones del reciente proceso, la Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH) y la Organización Marroquí de Derechos Humanos (OMDH) consideraron que el desarrollo del proceso registró algunos avances positivos, aunque insistieron en la necesidad de acabar con los juicios militares para civiles.
Del mismo modo, condenaron la larga detención preventiva (2 años y 3 meses) de todos los acusados, y la no investigación por parte del juez de las frecuentes denuncias de torturas, que según los acusados y la defensa sirvieron para arrancarles confesiones que luego han servido como prueba, a falta de otras.
La presidenta de la AMDH, Jadiya Riadi, calificó el veredicto de "desorbitado, injusto y muy duro", y aseguró que "la mayoría de los saharauis son defensores de los derechos humanos (...) y están condenados por sus ideas".
Riadi apuntó que "el tribunal no pudo encontrar pruebas contra ellos", y como ejemplo puso las fotos que el fiscal exhibió de varios de los acusados con el presidente del independentista Frente Polisario.
Asimismo, la representante de la AMDH se mostró pesimista ante los próximos procedimientos judiciales ya que "ahora solo es posible pasar por el Tribunal de Casación, que se encarga de revisar las formas en las que se llevó a cabo el proceso pero no el contenido".
"La única solución que tienen es una decisión política, un indulto", sentenció.
En cuanto a la OMDH, no quiso valorar el veredicto por no haber tenido acceso a una copia oficial del mismo y desconocer por consiguiente los motivos en que el juez fundamenta las condenas, pero su presidente, Ahmed Nachnach, se congratuló al menos de que no se haya pronunciado ninguna pena de muerte.
Respecto a la aparición de tres ministros marroquíes frente al tribunal, donde se fotografiaron junto a familiares de las víctimas marroquíes -sin hacer lo mismo con los familiares de los saharauis juzgados- Nachnach no vio ningún problema, pues según él "acudieron en tanto que responsables políticos a expresar su solidaridad, y eso no constituye ninguna presión al tribunal".
La OMDH dejó claro que consideró "justo" el desarrollo del proceso por las condiciones en que la defensa pudo ejercer su trabajo, pero eso no significa que considerasen la sentencia justa.