
Madrid, 24 ene (EFE).- El delegado madrileño de Seguridad, Enrique Núñez, ha dicho hoy que "mas allá de la anécdota desafortunada" que a su juicio fue la intervención telefónica del técnico del Samur que atendió las llamadas en la tragedia del Madrid, "lo más importante es que el servicio se prestó".
En rueda de prensa tras la Junta de Gobierno, el también portavoz del Gobierno municipal de Ana Botella ha dicho que ese técnico -que es conductor de ambulancias, según aclaró el mismo hace tres semanas- "ha sido retirada del servicio de atención al teléfono porque no estuvo muy afortunado en la atención telefónica de las llamadas" en la madrugada del 1 de noviembre.
De todas formas, Nuñez ha declarado que, "independientemente de la poca fortuna que tuvo" este técnico, "lo importante es que el servicio fue despachado" porque "había un supervisor que fue mandando las ambulancias".
El responsable municipal de Seguridad ha indicado que, al ser funcionario, el Ayuntamiento debe atender al Estatuto de la Función Pública y no al de los Trabajadores a la hora de aplicar posibles sanciones.
Este funcionario, que dijo que esa noche estaba "prácticamente forzoso" en ese puesto y que no tiene "facilidad de palabra" atendió algunas llamadas de jóvenes que pedían auxilio desde el Madrid Arena sin creerles y preguntándoles si había bebido.
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