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Imponen a Santiso la fianza más alta decretada en la 'Operación Pokemon'

Lugo, 26 sep (EFE).- El propietario de la empresa Sanle, Manuel Santiso, quedó finalmente en libertad tras prestar declaración ayer ante la instructora de la llamada 'Operación Pokemon', Pilar de Lara, durante más de cinco horas, aunque para evitar la cárcel tuvo que abonar la fianza más elevada impuesta hasta ahora a los imputados en este proceso, 20.000 euros.

Fuentes de su defensa informaron a EFE de que el hecho de que se le impusiese una fianza más elevada vino motivado por la exigencia del ministerio fiscal, como consecuencia de la capacidad económica del propio imputado.

Hasta ahora, habían logrado evitar su ingreso en prisión con el abono de la correspondiente fianza el alcalde de Boqueixón, Adolfo Gacio, que pagó 10.000 euros; el de Ourense, Francisco Rodríguez, que ingresó 6.000 euros; y el delegado del grupo Vendex en Galicia, José María Tutor, que tuvo que abonar 4.000 euros.

Por otra parte, Pilar de Lara decidió enviar a prisión a otro de los dos imputados que ayer prestaron declaración en el Juzgado de Instrucción Número 1 de Lugo hasta altas horas de la madrugada, el responsable del sistema ORA en Lugo, Javier Reguera, al que acusa de delitos como cohecho, tráfico de influencias, blanqueo y falsedad documental.

Fuentes de la defensa informaron a EFE de que la declaración de Javier Reguera terminó en torno a las cuatro de la madrugada y, entonces, la jueza decretó su ingreso provisional en prisión sin fianza.

El responsable de la empresa que gestiona el sistema ORA en Lugo, Javier Reguera, comenzó a declarar ante la jueza instructora a las diez menos cuarto de la noche, después del receso que se produjo tras finalizar, en torno a las siete y media de la tarde, el interrogatorio del propietario de Sanle, Manuel Santiso, que también fue detenido el jueves

Fuentes vinculadas a la investigación confirmaron que la declaración de Reguera se prolongó hasta altas horas de la madrugada, dado que se trata de una de las piezas claves de la investigación, precisamente por su proximidad al expresidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, Francisco Fernández Liñares, que fue enviado a prisión por la instructora después de ser interrogado durante más de diez horas.

Santiso prestó declaración ante la instructora de la Operación Pokemon durante más de cinco horas, según informaron a Efe fuentes de su defensa, y, aunque su interrogatorio finalizó en torno a las siete y media de la tarde, tuvo que esperar a que declarase Javier Reguera para conocer los cargos que se le imputaban y su situación personal.

De hecho, al finalizar el interrogatorio de ambos, la instructora celebró una "vistilla" para decidir los cargos que les imputaba y si los enviaba o no a prisión.

Está previsto que hoy pasen a disposición judicial los otros dos detenidos en la jornada de ayer, el jefe de la Policía Local de Ourense, Abelardo Ulloa, que pasó la noche en los calabozos de la Comandancia de la Guardia Civil, y el antiguo coordinador de la Policía Local de Lugo, Daniel Corral, jubilado hace tres años.

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