Ourense, 17 sep (EFE).- Javier Cruz, acusado del asesinato de Laura Alonso, una joven de 19 de años que apareció muerta en Toén (Ourense) en 2009, ha reconocido hoy ante el tribunal que lo juzga como presunto responsable de esta muerte, que "no tenía intención de matarla", y que todo sucedió en medio "de una disputa".
"Me escupió, me pegó y fue ahí cuando, no sé por qué motivo, le eché las manos al cuello y en poco tiempo se cayó", declaró el procesado en respuesta a las preguntas que le formularon los abogados del Estado durante el juicio que comenzó hoy en la Audiencia Nacional con el único testimonio del acusado.
La vista se celebró en medio de una gran expectación dado que participaron un centenar de vecinos de la localidad de Xestosa (Toén), de la que era natural la víctima.
Durante la vista, defensa y acusación se centraron en las discrepancias existentes sobre cómo transcurrieron los hechos, la manera en que se produjo y la relación que mantenían acusado y víctima en esa fecha.
El abogado de la familia recordó que Cruz reconoció los hechos en sus dos últimas declaraciones y apuntó que en "este crimen" concurren circunstancias agravantes serias, dado que Cruz habría abusado de su superioridad física ante su víctima, que pesaba 45 kilos, y la muerte se registró en un descampado donde no había nadie que la auxiliara.
Acusado y víctima mantuvieron una relación oculta de sus respectivas parejas, han explicado a Efe fuentes próximas a la investigación, que también han dicho que Laura Alonso había interpuesto una denuncia años antes contra Javier Cruz por malos tratos y que se habían intercambiado mensajes amenazantes.
Según Cruz, Laura y él mantuvieron "una relación difícil" que posteriormente habían dejado y retomado a escondidas de sus respectivas parejas, y negó que hubiera por parte de él "acoso" a la víctima a través del móvil.
Mañana, el juicio continuará, entre otros, con la declaración de los testigos, entre ellos los padres de la víctima y del acusado, los agentes que llevaron la investigación.
Antes de que se iniciase la sesión de hoy, el padre de la joven, Cesáreo Alonso, pidió que "se haga justicia" y "se sepa toda la verdad sobre lo que era él y lo que hizo sufrir" a su hija.
Un grupo de amigos de Laura Alonso abrió la jornada en el exterior del Palacio de Justicia con una pancarta en la que se solicitaba, precisamente, "justicia" para la joven de la localidad orensana de Toén "asesinada hace tres años".
El fiscal y el abogado del Estado reclaman una condena por homicidio de 14 años de cárcel, mientras que los padres de Laura Alonso piden 20 años por asesinato y la defensa la pena mínima, de uno a cuatro años, por homicidio imprudente.
