
Barcelona, 14 sep (EFE).- Las defensas del doctor Carlos Morín y sus colaboradores, acusados de practicar un centenar de abortos ilegales en sus clínicas de Barcelona, han planteado hoy la nulidad del proceso alegando irregularidades en la instrucción, entre ellas que se abriera a raíz de un documental televisivo con cámara oculta.
Con las cuestiones previas planteadas por las partes, ha comenzado hoy en la Audiencia de Barcelona el macrojuicio por los abortos ilegales en las clínicas del doctor Morín, que afronta una petición fiscal de más de 300 años de cárcel, de los que cumpliría un máximo de doce.
Además de Morín y su esposa, que se expone a una pena de 204 años de prisión, en el banquillo se sientan otros nueve colaboradores del doctor, entre psiquiatras anestesistas y ginecólogos que supuestamente practicaron o permitieron los abortos, para quienes la Fiscalía pide penas de entre 50 y más de 200 años de prisión.
Otro de los ginecólogos imputados, con una petición fiscal de 50 años de cárcel, está huido desde hace meses, después de que la Audiencia le levantara las medidas cautelares de comparecencia periódica en el juzgado que tenía impuestas, y el tribunal lo ha declarado el rebeldía.
La primera sesión del juicio ha estado marcada por las alegaciones previas planteadas por las defensas, que han pedido que se declare la nulidad de todo el proceso alegando distintas irregularidades durante la instrucción de la causa penal, iniciada en el año 2006.
Uno de los principales motivos por los que los letrados han defendido la nulidad del proceso es que la instrucción está "viciada" desde su inicio, dado que se emprendió a raíz de un documental con cámara oculta de una televisión danesa cuando, mantienen los abogados, la jurisprudencia impide dar validez a una prueba de ese tipo.
Precisamente, la Fiscalía y las acusaciones han solicitado hoy al tribunal que llame a declarar como testigos a los periodistas daneses responsables de ese documental -en el que los reporteros se se dirigían a la clínica para pedir un aborto de una mujer en avanzado estado de gestación-, una diligencia que les ha sido denegada durante la instrucción de la causa.