Jerusalén, 15 jul (EFE).- Israel estudia imponer sanciones a la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU en respuesta a lo que considera acciones de "deslegitimación" y apoyo a la construcción palestina no autorizada en la zona de Cisjordania que controla, señalaron a Efe fuentes oficiales israelíes.
"Si continúan con estas actividades, podríamos aplicar sanciones más duras, como la limitación de movimientos de sus trabajadores palestinos", señalaron las fuentes bajo condición de anonimato.
Las fuentes acusaron a la OCHA (siglas en inglés de la citada agencia) de "sobrepasar claramente su mandato, que consiste en investigar y hacer informes", y de producir documentos "parciales basados en datos incorrectos" sin pedir antes una "reacción o comentario" al organismo militar israelí a cargo de la zona.
"También vemos que después de una demolición de construcciones ilegales les dan tiendas y caravanas, algo que claramente no está en su mandato", agregaron las fuentes.
Esta situación se produce en la denominada zona C, los cerca de dos tercios del territorio palestino ocupado de Cisjordania en los que Israel controla los asuntos administrativos y de seguridad, según la división establecida en los Acuerdos de Oslo (1993).
Israel impide de manera casi sistemática la construcción palestina en zona C, en la que están los asentamientos judíos.
La tensión al respecto se ha agravado en los últimos meses, en los que se han sucedido las conversaciones y quejas, incluida una presentada por la diplomacia israelí en Nueva York la pasada semana, agregaron.
Fuentes diplomáticas israelíes señalaron que la imposición de sanciones a la OCHA no está por su parte sobre la mesa.
"No es ningún secreto que a veces tenemos discrepancias, por utilizar un término suave, con algunas agencias de la ONU, pero eso no significa que estemos considerando la opción de las sanciones ni que vayamos a detener nuestra cooperación", señalaron.
El periódico "Haaretz" publica hoy que las autoridades israelíes valoran dos opciones concretas de represalias: limitar los visados a los empleados extranjeros de la OCHA y rescindir los permisos de trabajo y residencia a los trabajadores locales.
El responsable del organismo militar que coordina las actividades del Gobierno en Gaza y Cisjordania, el comandante general Eitan Dangot, está tan molesto con la OCHA que ha ordenado la detención de todos sus proyectos de construcción sin permiso israelí y que se expidan órdenes para su demolición, añade el rotativo.
