
Santiago de Compostela, 5 jul (EFE).- Manuel Fernández Castiñeiras, el electricista detenido como presunto autor material del robo del Códice Calixtino, tenía llaves de las estancias de la Catedral donde se custodian las reliquias y solía llevar bombones a la Catedral, han informado a Efe fuentes próximas al caso.
Este exempleado, que prestó sus servicios como autónomo durante 25 años en el templo, "andaba por aquí como por su casa, merodeaba por todos lados, con los que tenía confianza", han indicado, pero "de que había hecho copias de las llaves nos enteramos muy tarde", han precisado.
Fernández Castiñeiras "se llevó piezas" de la seo incluso después de la sustracción del valioso manuscrito, y llegó a amenazar al deán, José María Díaz, con el que mantenía discrepancias, de que "iba a arruinarle la vida".