La magistrada del juzgado número 1 de Alcañiz (Teruel) ha condenado este lunes a F.R., jefe de mecánicos de la escudería BVM Target de Rábena (Italia), por 'simulación de delito' a una multa de cuatro meses a razón de diez euros diarios de cuota, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Aragón.
ZARAGOZA, 7 (EUROPA PRESS)
La magistrada del juzgado número 1 de Alcañiz (Teruel) ha condenado este lunes a F.R., jefe de mecánicos de la escudería BVM Target de Rábena (Italia), por 'simulación de delito' a una multa de cuatro meses a razón de diez euros diarios de cuota, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Aragón.
El joven italiano fue detenido este sábado, 5 de mayo, a las 18.15 horas, por efectivos de la Guardia Civil y este lunes ha pasado a disposición judicial.
F.R. reconoció ante el juez el delito que se le imputaba y el hecho de haber llamado desde su teléfono móvil pidiendo un rescate de mil euros por su secuestro.
El joven, de 29 años, aceptó la pena solicitada por el Ministerio Fiscal, por lo que tras la celebración de un juicio rápido de conformidad, la juez dicto sentencia condenatoria para el imputado.
El mecánico F.R. fue detenido este sábado al ser localizado en perfecto estado tras haber llamado a su jefe asegurando que había sido secuestrado y que le pedían un rescate, si bien no fijó una cantidad.
Su jefe, Roberto Venieri, manager del equipo italiano BVM Target, se personó en el puesto de la Guardia Civil de Alcañiz, diciendo que había recibido una llamada de un mecánico de su equipo en la que le decía que estaba secuestrado y le pedía que no avisara a la policía.
Ante esta denuncia, el equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Alcañiz inició una investigación con el fin de aclarar lo sucedido. Horas después, la patrulla del puesto de Mas de las Matas (Teruel) localizó un vehículo circulando, cuyo único ocupante fue identificado como F.R., quien se encontraba ileso y en perfecto estado.
Los agentes comprobaron que llevaba consigo sus pertenencias personales, documentación y teléfono móvil. Al ser preguntado por los hechos, manifestó que eran falsos y que las llamadas realizadas y los mensajes no se habían producido y que él no había sido secuestrado. Fue tras estas explicaciones, cuando se procedió a su detención por simulación de un delito de secuestro.