
Madrid, 18 abr (EFE).- El acusado de agredir sexualmente y rajar el rostro de su novia con unas tijeras desde el ojo hasta la oreja en un piso de Villaverde en 2011 ha negado hoy los hechos y ha culpado del corte en la cara de su pareja a otro hombre que estaba en la habitación.
Así lo ha asegurado en el juicio que se ha celebrado en la Sección 26 de la Audiencia Provincial de Madrid, en el que el acusado, Abderrazzak L., de nacionalidad marroquí, se enfrenta a una petición de la Fiscalía de 29 años de prisión por un delito de agresión sexual y otro de lesiones con grave deformidad.
"Juro que soy totalmente inocente", ha dicho el procesado en el turno de última palabra del juicio, que ha quedado visto para sentencia.
Aderrazzak ha negado que el 16 de abril de 2011, después de pasar varias horas de fiesta, forzara a su novia para poder tener relaciones sexuales con otro hombre, apodado "el colombiano", que había subido con ellos a la habitación.
Ha asegurado que, aunque él no vio nada, fue "el colombiano" quien le clavó las tijeras en la cara a su pareja.
Por su parte, la víctima, J.R.S., de nacionalidad brasileña, que en la actualidad sigue siendo pareja del procesado y que ha retirado la denuncia contra él, se ha acogido a su derecho a no declarar.
Un policía que recogió el testimonio de la mujer después del suceso ha explicado que, según ella, la pareja estuvo de fiesta durante la noche del viernes 15 de abril, consumiendo alcohol, y conoció a un hombre de origen colombiano, de unos 50 años, que quería tener relaciones sexuales con su novio a cambio de dinero.
Al día siguiente, los tres se dirigieron a la habitación que la pareja compartía en la calle Sahara, donde la chica se metió en la cama con la pretensión de permanecer al margen de los dos hombres, de acuerdo con el relato de la mujer al agente.
En un momento, ha detallado el policía, los dos varones entraron en la habitación y trataron de mantener relaciones sexuales entre ellos sin conseguirlo, para después obligar a la mujer a participar en un trío, a pesar de que ella se resistió y les pidió que la dejaran en paz.
Con posterioridad, ha agregado el agente, comenzó una discusión entre el acusado y "el colombiano", cuando el primero le reclamó el dinero que le había prometido, momento en que el procesado rajó el rostro de la mujer.
Una vecina que vivía con su hijo de 8 años en el mismo piso que la pareja ha precisado que, cuando la chica y los dos hombres estaban en la habitación, a pesar de había música muy alta, escuchó que la mujer decía que ella no quería hacerlo, que no la obligaran y que la dejaran tranquila.
Después, ha recordado la vecina, Abderrazzak, que tenía "sangre en las manos", llamó a su habitación diciéndole que le había dado a su chica y vio salir a "el colombiano".
Ha apuntado que, en la habitación, atendió a la mujer presionando la herida con un paño limpio, mientras él intentó tirarse por la ventana, llorando y diciendo que le dolía mucho lo que había hecho y pidiéndole perdón a su chica.
Tres policías que acudieron al domicilio el día de los hechos han señalado que la víctima les dijo que había sido agredida por su pareja "intencionadamente" por una discusión con una tercera persona que estaba en la habitación.