Un padre que fue procesado por hacer correr a su hijo de 10 años delante de cabestros (buey manso) en la corridas de San Fermín, en Pamplona (norte), fue absuelto por un juez local, afirman el jueves medios españoles.
El juez siguió las peticiones del fiscal, que justificaba sobre todo su pedido de absolución en el hecho de que el niño no resultó herido en la carrera y que no había supuesto ningún peligro para él.
Consultado por la AFP, el tribunal de Pamplona (Navarra) donde fue juzgado, dijo que no estaba en condiciones de confirmar la información.
Otro juez había decretado que el padre, separado de la madre del niño, pudiera visitarlo después de habérselo retirado tras el conocimiento de los hechos, según el diario El Mundo.
El padre fue identificado por una foto publicada en julio pasado en ese matutino, donde se veía, sonriente, llevar a su hijo de la mano mientras corría delante de los cabestros, que siguen a los toros durante los encierros de los Sanfermines.
Fue la madre del niño quien hizo intervenir a la justicia tras ver la foto.
Los conocidos encierros de toros en un recorrido de más de 800 metros por las calles de Pamplona durante las fiestas de San Fermín, están reservados a los adultos y anualmente causan heridos y contusos.
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