
A Coruña, 23 feb (EFE).- El Ayuntamiento de A Coruña ha trasladado hoy sus condolencias a la familia de Tomas Velicky, el joven eslovaco que desaparecido desde el pasado 27 de enero y cuyo cuerpo sin vida se encontró el pasado domingo, 19 de febrero, en las inmediaciones de la bahía coruñesa.
Una vez confirmada la identidad del joven estudiante, el Ayuntamiento coruñés ha emitido un comunicado en el que agradece la colaboración mostrada por todas las administraciones que han participado "en el mayor dispositivo de búsqueda que se ha desplegado en la ciudad".
Además, celebra que una vez las pruebas han confirmado la identidad del fallecido "se pueda poner fin a este trágico suceso".
El equipo del gobierno municipal también ha querido destacar la "solidaridad" y la "implicación de muchos ciudadanos que, con sus avisos, han ayudado a los equipos de búsqueda a recuperar los cuerpos de Tomas Velicky y de los policías nacionales Javier López, José Antonio Villamor y Rodrigo Maseda".
El Ayuntamiento recuerda que, en un acto heroico, estos agentes "no dudaron en lanzarse al mar para tratar de salvar al joven eslovaco".
El cuerpo fue Tomás Velicky, de 24 años, fue recuperado el pasado domingo en la playa de A Marosa, muy cerca de donde se encontró el cadáver de uno de los agentes implicados en la tragedia del Orzán, y posteriormente fue trasladado al Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (CHUAC) donde se le han practicado las pruebas científicas para confirmar su identidad.
El estado de descomposición del cadáver ha obligado a realizar pruebas de ADN para determinar la identidad.
El suceso se produjo cuando el joven eslovaco, que cursaba estudios en A Coruña con una beca Erasmus, fue arrastrado por el mar en la playa de Orzán, a la que se había dirigido tras una noche de fiesta.
Dos policías de paisano que se encontraban en la zona, Javier López, de 38 años, y Rodrigo Maseda, de 35, acudieron en su socorro, pero también fueron también arrastrados.
Un tercer agente, perteneciente a una patrulla Zeta y uniformado, José Antonio Villamor, de 34 años, se introdujo en el agua para ayudar a sus compañeros, aunque fue también arrebatado por el mar.
El cuerpo del Javier López fue recuperado en las horas posteriores al suceso, mientras que los de los otros dos agentes lo fueron el 2 de febrero tras una intensa semana de búsqueda en la que más de cien personas formaron parte del operativo especial.
Los tres agentes fueron condecorados a título póstumo con la medalla de oro al mérito policial en España y también han sido distinguidos por las autoridades eslovacas.