
Madrid, 11 ene (EFE).- El empresario secuestrado en marzo de 2008 en un hotel de La Moraleja y que fue liberado quince días después en Portugal ha afirmado hoy que, aunque todo el tiempo estuvo esposado, con los ojos vendados y cadenas en los pies, el peor momento que pasó fue cuando creyó que era víctima de un secuestro de ETA.
En el tercer día del juicio que se sigue en la Audiencia Provincial de Madrid a José Carlos Serna y a otros seis acusados de secuestro, que se enfrentan hasta a 22 años de cárcel, el vicepresidente de la empresa Decoexsa, Pedro Aguirre Ormaechea, ha recordado que cuando pensó que le llevaban en coche hacia el País Vasco tomó la decisión de no dejarse meter "en un agujero".
Sin embargo, cuando comprobó que le conducían a Galicia se tranquilizó, ha dicho el empresario, quien ha reconocido en la misma vista tanto a Serna, español, como a otros cuatro de los procesados -Elsa María M.G., María Manuela E., José Paulo M. y Luis Manuel C.G., todos de nacionalidad portuguesa-.
Aguirre ha recordado que fue citado en un hotel de La Moraleja el 6 de marzo de 2008 por unos señores que querían hacer un negocio de importación de pescado argentino, y que al llegar junto a otro empleado de su empresa, José María N.G., fue recibido por Elsa María, que se hizo pasar por secretaria del embajador de Brasil, y por María Manuela, que estaba dentro de un coche.
Después, al entrar en un bungalow del hotel los acusados José Paulo y Luis Manuel les golpearon, les amordazaron y les metieron en coches separados para llevarles a Muros (La Coruña).
La víctima ha declarado que, a pesar de tener los ojos cerrados, él se intentaba quitar la cinta adhesiva de sus ojos y pudo ver la cara de sus secuestradores, pero que a José Carlos Serna, a quien había conocido en una notaría, le reconoció enseguida por su voz.
Ha comentado que Serna, quien antes del juicio ha llegado a escaparse dos veces de prisión enviando órdenes de libertad falsas, le exigió que llamara a su hermano y le engañara para que fuera a verle diciéndole que había acudido a un curandero porque le habían detectado un cáncer.
Aguirre llamó entonces a su hermano, sabiendo que no se iba a creer esa versión, y pasados los días le volvió a llamar para, según indicaciones de Serna, exigirle que retirara la querella que le había interpuesto por la compra-venta de una finca y que le pagara 11 millones de euros.
La víctima ha destacado que no dejó de insultar a Serna cada vez que tenía ocasión y que psicológicamente mejoró su situación cuando el cabecilla del secuestro decidió liberar a José María N.G. el 11 de marzo para que retirara la denuncia que su esposa había puesto por su desaparición.
Finalmente, Aguirre ha relatado que le condujeron a Montegordo (Portugal), donde también recibió "guantazos" y permaneció atado y con los ojos vendados hasta que fue liberado por la Policía lusa.
Por su parte, José María N.G., empleado de Decoexsa, ha declarado que los secuestradores le pidieron varias veces que hablara con Aguirre porque éste "estaba poniendo difícil las cosas", y que cuando le dejaron libre le amenazaron de muerte a él y a su familia si contaba lo ocurrido.
Esta mañana también ha declarado el hermano de Pedro Aguirre, quien ha comentado que cuando recibió sus llamadas noto que "algo raro" ocurría, y ha reconocido que un mes antes del secuestro puso una querella por estafa a Serna por haberle defraudado varios millones de euros en la compra-venta de una finca a través del envío por fax de avales bancarios falsos.
El juicio, en el que también se sientan en el banquillo de los acusados Agapito M.Q. y Diego Antonio C.S., españoles, continua mañana con la declaración de otros testigos.
Relacionados
- Una veintena de familias de Almonte ocupa sus VPO que deberían haber sido entregadas en 2008
- Una veintena de centros educativos de la Región de Murcia realizarán 30 proyectos punteros en tecnología e innovación
- Una veintena de personas reciben las rebajas en Bilbao con un 'flashmob' para defender que la cultura "no se rebaja"
- Málaga acogerá más de una veintena de congresos hasta 2015 gracias a la iniciativa MálagaCON
- Más de una veintena de personas mueren en un atentado en el centro de Damasco