La Fiscalía Anticorrupción prevé retirar la acusación a uno de los procesados en el caso 'Nilo', sobre estafas a través de cartas que comunicaban premios falsos de lotería, al que supuestamente le habrían usurpado la identidad, ya que se ha determinado que la persona que fue citada al juicio no sería la misma que fue detenida en su momento en la operación policial.
MÁLAGA, 10 (EUROPA PRESS)
La Sección Novena de la Audiencia de Málaga comenzó el pasado día 9 de noviembre la vista oral, a la que acudieron 103 de los 113 acusados que fueron localizados para esta sesión. Así, 87 procesados se acogieron a un acuerdo con el fiscal, que supone 23 meses y 15 días de prisión por un delito continuado de estafa en concurso ideal con otro de falsedad en documento público. El juicio se retomará el próximo día 15.
En la primera sesión del juicio, la defensa de uno de los acusados informó a la Sala de que su cliente no era la persona que fue arrestada dentro del operativo policial en julio de 2005, en el que fueron detenidas más de 300 personas por un supuesto fraude, consistente en enviar cartas de manera "simultánea" a miles de residentes extranjeros con documentos simulaban un premio de lotería.
Según han explicado fuentes del caso, uno de los arrestados dio al ser detenido unos datos personales. Pocos días después, se ordenó su ingreso en prisión, donde permaneció hasta el 23 de marzo de 2006, quedando en libertad. Cuando se le quiso comunicar el auto de procesamiento, no fue localizado, han apuntado, por lo que entonces se dictó una orden de busca captura para notificárselo.
Así, en abril de 2010, el hombre que se sentó en el banquillo de los acusados en la primera sesión del juicio fue arrestado en un aeropuerto de España cuando regresaba de un viaje, y pasó una noche en los calabozos, ya que salió que tenía pendiente esa requisitoria para notificarle el auto de procesamiento de un asunto del que, según han indicado las fuentes, éste no tenía conocimiento.
En la primera sesión de la vista oral, la abogada de oficio del acusado argumentó que su cliente residía en Mallorca y estaba trabajando cuando se produjeron las detenciones, mostrando documentación de la empresa acreditativa, por lo que solicitó que por parte de la Policía se cotejaran las huellas para que se comprobara "que eran personas diferentes".
Asimismo, las fuentes han indicado que este procesado no ha estado en la provincia malagueña, más que para el inicio del juicio. A la petición de la defensa, la Fiscalía añadió que se realizaran comprobaciones con el centro penitenciario. Según fuentes judiciales, los resultados han sido que no hay coincidencia entre la persona detenida y la que acudió al juicio.