Madrid, 27 oct (EFE).- Reclusos de distintos centros penitenciarios madrileños han realizado cursos de hostelería para aprender a tirar cerveza o elaborar tapas, y han participado en programas que les han enseñado, por ejemplo, a arbitrar partidos de baloncesto, con el fin de facilitar su reinserción.
Los cursos, que se han clausurado hoy en la Escuela Superior de Hostelería y Turismo de Madrid, han estado dirigidos a internos del Centro Penitenciario Madrid II, del Centro de Inserción Social Victoria Kent y de la Unidad de Madres.
"El ingreso en prisión no puede ser un elemento de exclusión, no debe ser el final de nada", ha explicado en el acto la subdirectora general de Tratamiento y Gestión de las Instituciones Penitenciarias, Ángeles Cifuentes, que ha apoyado la iniciativa.
El programa de hostelería lo han cursado 30 alumnos, como José Luis Roca, que cumple condena por un delito de violencia de género, y que ha contado que "durante dos semanas" ha aprendido a "hacer distintos tipos de tapas, a conocer los aliños que llevan y a saber cómo se monta y se sirve una mesa de un restaurante".
Su compañera en el curso, Luz Mari Pérez, ha indicado que la formación le ha "ayudado mucho" y espera que le sirva para encontrar trabajo cuando termine de cumplir su condena.
Grey Manuel, interno en la prisión de Alcalá Meco, optó, sin embargo, por hacer el curso de arbitraje de baloncesto: "me ha ayudado a abrir la mente, a despejarme gracias al deporte. Me ha cambiado mucho".
El presidente de la Fundación FEB 2014, de la Federación Española de Baloncesto, que ha participado en el programa social "Basket: la salida", ha recalcado que es importante apoyar este tipo de iniciativas en las cárceles porque este deporte tiene que tener también "una función social".
