La Fiscalía General del Estado cuenta desde ayer con la figura del Fiscal de Sala de Criminalidad Informática. El nuevo Fiscal coordinará, tal y como especifica la Instrucción 2/2011 de la Fiscalía, que describe las funciones y facultades del nuevo cargo, la actuación de los fiscales provinciales que integrarán esta nueva especialidad, para "combatir el progresivo aumento de investigaciones criminales vinculadas al empleo de nuevas tecnologías y, de forma específica, de Internet, como red de redes".
La Instrucción alerta de "la aparición de nuevas formas de criminalidad y de dinámicas y mecanismos, hasta ahora no conocidos, en la comisión de conductas ilícitas de carácter más tradicional".
Delitos que, asegura el documento, van desde los personalísimos, como el honor o la intimidad; pasando por estafas, corrupción de menores y pornografía infantil, hasta aquellos de naturaleza supraindividual como, por ejemplo, la seguridad del Estado.
Las competencias de esta nueva Fiscalía, continúa la Instrucción, se fijan en un "catálogo inicial abierto" porque, aclara el documento, "la evolución tecnológica hace más que previsible la aparición de nuevas formas de delincuencia".
Así, entre otros, los delitos que serán objeto de investigación por la nueva figura, serán los que se cometan sobre los propios sistemas informáticos -sabotaje, acceso sin autorización a datos, descubrimiento y revelación de secretos-; aquellos que se realicen a través de las nuevas tecnologías -estafa; acoso a menores de 13 años (child grooming), o corrupción de menores o de personas discapacitadas-; y los que, además de utilizar las nuevas tecnologías, "entrañen especial complejidad en su investigación", como falsificación documental, injurias y calumnias contra autoridades, amenazas y coacciones o delitos contra la integridad moral.
Con el objetivo de combatir estos delitos, el Fiscal podrá, entre otras funciones, practicar diligencias referentes a hechos delictivos relacionados con la criminalidad informática; coordinar los criterios de actuación de las distintas Fiscalías, buscando "una efectiva unidad de actuación especializada"; recabar informes de las distintas secciones provinciales de criminalidad informática -también reguladas en la Instrucción-; al tiempo que elaborará anualmente un informe sobre los procedimientos y actuaciones seguidas y presentarlo ante el Fiscal General del Estado.
Consulte la Instrucción
