
Al menos un policía ha muerto, 120 personas han resultado heridas y 150 han sido detenidas tras la 'Toma de Venezuela', según cifras de la oposición. Solo Caracas se libró de la violencia entre manifestantes y la policía. Los incidentes fueron múltiples, pero los más graves sucedieron en San Antonio de los Altos, uno de los municipios del estado Miranda, gobernado por Henrique Capriles.
Tres policías fueron tiroteados en San Antonio de los Altos. Uno de ellos perdió la vida tras recibir un balazo en el estómago. El comandante Néstor Reverol, atribuyó a manifestantes opositores los disparos.
La jornada dejó imágenes muy fuertes, como la agresión de una decena de policías de Aragua contra una mujer, la persecución a tiro limpio de paramilitares chavistas contra opositores en Mérida o los cuatro jóvenes heridos de bala en Maracaibo.
Cientos de miles de personas han salido a las calles este miércoles para secundar el llamamiento de la Mesa de Unidad Democrática (MUD) a "tomar Venezuela" para restaurar el "hilo constitucional" que, según denuncia la coalición opositora, ha roto el Gobierno de Nicolás Maduro.
La 'Toma de Venezuela' es la gran marcha opositora para denunciar los obstáculos del 'chavismo' a la celebración de un referéndum en el que los venezolanos decidan si revocan o no el mandato presidencial de Maduro antes de que expire oficialmente, en 2019.
El epicentro de la "Toma de Venezuela" es Caracas, pero esta vez la coalición opositora ha convocado a sus seguidores en todos los rincones de la nación caribeña para que, en señal de protesta por el bloqueo institucional, bloqueen también las principales vías.
En la capital los manifestantes, ataviados con camisetas blancas y banderas, han marchado desde cinco zonas hacia la avenida Francisco Fajardo, donde los líderes de la MUD se han dirigido a ellos para dar a conocer "el siguiente paso contra el golpe", según Henrique Capriles.
Crisis venezolana
La marcha tiene lugar en un momento de especial tensión en Venezuela. La Asamblea Nacional ha acordado iniciar un proceso para examinar la "responsabilidad política" de Maduro en la crisis económica y social que asuela al país, lo que podrá derivar en un juicio en su contra.
Este órdago parlamentario responde a la suspensión 'de facto' del referéndum revocatorio. Varios tribunales anularon la semana pasada la recogida de firmas para la primera fase y, en consecuencia, el Consejo Nacional Electoral (CNE) pospuso la segunda.
La MUD activó la consulta popular con la esperanza de celebrar elecciones presidenciales de forma anticipada. Para conseguirlo, la votación debería convocarse antes del 10 de enero de 2017, cuando se cumple el ecuador del mandato de Maduro. De lo contrario, aunque éste sea cesado, su vicepresidente, Aristóbulo Istúriz, le sustituirá hasta 2019.
A pesar de estas fricciones, la Iglesia Católica anunció el lunes que Gobierno y oposición habían llegado a un acuerdo para iniciar un diálogo político que en un principio estaba previsto para el 30 de octubre en Isla Margarita, pero ha tenido que aplazarse 'sine die'.