
La crítica más extendida a los planes de pensiones españoles es que las comisiones que se cobran por su gestión son altas, pero los rendimientos que se ofrecen a cambio no están a la altura.
Si sobre algo existe consenso entre expertos y gestoras de fondos y planes en lo referente al tercer pilar, los planes de pensiones privados, es la opinión general y sin fisuras de que la inmensa mayoría de los vehículos de este tipo que se comercializan en España son caros y malos. O, como afirma el representante de una gestora multinacional que prefiere no ser citado, "en planes de pensiones pagas por un jamón ibérico de bellota y te comes la mortadela".
La crítica se centra en dos aspectos: por un lado, que se realiza -o así se percibe- una gestión menos eficiente en planes de pensiones frente a fondos de inversiones; por otra parte, se detectan comisiones de gestión más elevadas en el caso de los primeros frente a los segundos. "El coste de gestión y de administración en Fondos de Pensiones es mucho mayor que en Fondos de inversión, ya que el patrimonio medio por partícipe es muy inferior -casi cuatro veces menor, 6.000 euros frente a 24.000-, su captación es más onerosa, porque existen unos límites anuales a las aportaciones, y porque es un producto ilíquido hasta la jubilación, lo que supone una dificultad añadida para la comercialización" justifican desde Inverco, la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones. Recientemente, dicha institución ha hecho público un informe en el que defendía la tesis contraria, que la comisión media de gestión en los planes de pensiones -con datos de 2012- ha sido menor, del 0,8 por ciento frente a la media de los fondos, del 0,94 por ciento en el mismo periodo.
Desde Morningstar se han mostrado especialmente críticos con la metodología utilizada; si bien consideran que los números en sí mismos son correctos, estiman que se han utilizado los mismos parámetros para comparar planes privados y de empresa con fondos de inversión. De hecho, Javier Sáez de Cenzano, jefe de análisis de Morningstar en España, denunciaba esta realidad en el primer número de Inversión a Fondo: "Creemos que debe haber una mejora generalizada en la calidad de los productos, así como en la transparencia y el precio -comisiones- de los mismos. De los planes con al menos cinco años de historial -excluyendo garantizados-, sólo un 9 por ciento ha batido al índice relevante en su tipo de activo. En renta variable sólo 18 de 176 planes han cubierto este objetivo mínimo", afirmaba, justificando en este desajuste que en la última entrega de los premios Morningstar a los mejores planes de pensiones quedasen varias categorías desiertas.
Otra de las críticas más extendidas a la gestión de planes de pensiones -especialmente en el caso de gestoras pertenecientes a entidades bancarias- es que suele ser costumbre utilizarlos como cajón de sastre donde aparcar discretamente inversiones que no han tenido mucho éxito. Antonio Salido, responsable de marketing de Fidelity, critica que muchos de estos planes cuentan con "una cartera de ETF que no se mueve y con acciones que rotan... o no". "La porquería -las operaciones que han salido mal- la enchufan a los planes de pensiones" afirma, directa, la CFA, Ana Hernández.
Ejemplos y ejemplos
Más allá de esta polémica, la realidad es que dentro del universo de planes de pensiones disponibles para el inversor español tanto los productos que destacan por su buen comportamiento como aquellos que están firmando caídas de doble dígito en lo que va de ejercicio tienen la comisión más alta de gestión, el 2 por ciento.
Por la parte positiva, el plan que mejor comportamiento muestra en el año es el Novaplan USA PP; es un pequeño plan de Caser -su patrimonio apenas roza los 140.000 euros- recomendado para inversores más agresivos, dado que invierte al menos un 75 por ciento en renta variable estadounidense. Sube un 17,87 por ciento hasta junio -según datos de Morningstar-, cerca de un 9 por ciento en el anualizado a tres años y un 5,14 por ciento en el anualizado a cinco años.
En el plano negativo, los planes que peor están funcionando este año son aquellos que invierten en países emergentes, especialmente en sus bolsas; tales son los casos del Caser Renta Variable Global E. G. PP, el Europopular Emergentes PP, el Ibercaja Pensión Emergentes PP y el Bankia Bolsas Emergentes PP. Todos presentan comisiones de gestión del 2 por ciento -la más alta en España- y se dejan más de un 10 por ciento en el año, como se puede apreciar en el gráfico adjunto.
Si en vez del comportamiento se optase por mirar aquellos planes con mayor patrimonio en España, las altas comisiones vuelven a aparecer: de los diez productos con mayor número de activos bajo gestión, sólo dos presentan una comisión de gestión inferior al 1 por ciento: el Plancaixa Ambición PP y el BBVA Protección 2013 PP, con sendas comisiones del 0,8 y el 0,95 por ciento.