Indices Mundiales

¿Es la Reserva Federal tan cauta como parece?

Deja la puerta abierta a más subidas de tipos pero dudamos de que lo haga.

El que esperaba sorpresas del comunicado de la Fed se habrá quedado con las ganas. Los términos utilizados han sido lo bastante ponderados como para entregar un mensaje cauto, perfectamente equilibrado entre crecimiento e inflación. A primera vista, no hay nada nuevo con respecto a comentarios anteriores. Pero, como siempre, las novedades aparecen de forma más clara en una segunda lectura. Por primera vez este año, por ejemplo, el comunicado se fija menos en los riesgos que en los avances obtenidos durante el verano. Los comentarios giran en torno a 3 párrafos de importancia desigual: el primero sobre el crecimiento, el segundo sobre la inflación y el último sobre la posibilidad de una subida adicional de los tipos.

- Crecimiento. Le dedica sólo 2 líneas. ¡Difícil ser más escueto! La Fed se limita a observar la desaceleración de la economía. Ni menciona el riesgo de una recesión ni dice nada del hecho que la baja del petróleo suponga un balón de oxígeno. Esta prudencia se debe probablemente al calendario político ya que no queda muy bien hablar de recesión poco antes de unas elecciones. Quizás se deba también este tiento a la dificultad que entraña prever el impacto de la crisis inmobiliaria sobre el resto de la economía. La Fed se niega a mojarse

- Inflación. Es el núcleo del comunicado y se refiere a ella en un tono muy positivo. Persisten las presiones inflacionistas pero debería producirse una mejora. La Fed sugiere sin decirlo que la subida de los precios puede haber tocado techo durante el verano y que está lista para tolerar la inflación subyacente por encima de su zona de confort mientras sigan vivas las fuerzas que moderan las expectativas en el medio plazo

- Tipos de interés. Una subida dependerá de cómo los datos económicos dibujen el equilibrio entre el crecimiento y la inflación. El párrafo sobre este tema está al final del texto y parece haber sido escrito corriendo, más bien por compromiso. Es como si Bernanke lo hubiera colocado allí para satisfacer al ala dura del consejo y para equilibrar los comentarios más bien positivos sobre la inflación.

En resumen, la Fed parece satisfecha de la evolución de la economía y por lo tanto más cómoda con la decisión de este verano de no incrementar más los tipos. Ciertos analistas argumentarán que el consejo se muestra duro al dejar la puerta abierta a una subida adicional de los tipos. No estamos de acuerdo. El banco central quizás no sea tan cauto como parece y valora más el riesgo de una recesión que el riesgo inflacionista. Por eso no creemos probable otra subida de los tipos.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky