
El suave invierno de la costa norte de Marruecos invita a descubrir la sabrosa medina de Tetuán, Patrimonio de la Humanidad, desde este hotel coqueto que regenta una pareja española.
Los lectores de El Economista que se alojen en el Hotel Blanco Riad los días 22 a 24 de noviembre reservando directamente en hotel tendrán como cortesía pasteles marroquíes, té a la menta y fruta fresca en su habitación.
En el camino desde Ceuta al sur, Tetuán se divisa como un enorme pueblo blanco andaluz. Y el Hotel Blanco Riad es la excusa perfecta para descubrir la ciudad, desde su medina, Patrimonio de la Humanidad. Hay que hacer un alto en la ruta para entrar en esa antigua medina, sus calles sinuosas, su ancestral mercado, sus plazuelas, y comprender los motivos del sello de la UNESCO.
La vida en las calles es desbordante, entre fachadas encaladas y edificios de estilo colonial de la época del protectorado, el "Ensanche Español". El Hotel Blanco Riad ocupa una preciosa casa con patio del siglo XVIII. En 1860 fue consulado español y en el tiempo del protectorado fue la casa del "Bachá". Luego vivió la familia Ben Hassain y después fue un palacio de bodas. Columnas, pilares y arcos conforman ese patio con fuente a cuya galería dan las nueve habitaciones. Completan el edificio un gran patio ajardinado exterior desde el que se escucha el rumor de la fuente, y una azotea desde la que se divisan la medina y la alcazaba. Todas sus habitaciones son silenciosas, luminosas, acogedoras y distintas. Y en nuestro próximo viaje, Tetuán será el destino.
La cocina
Dando a los dos patios, el Riad dispone de un precioso comedor de columnas y artesanía árabe del nido de avispa. Sirve fina cocina marroquí y moderna con sugerencias de autor, como el canelón de berenjena relleno de marisco sobre pasta de aceituna y miel o la crema de melón con carne de orza. El menú cambia cada día según el mercado. Previa reserva. Precio medio, 16 euros.
Actividades
Paseos organizados por la medina, visita a museos de la ciudad, ruta de los zocos de la zona y relax en los hammam tradicionales. Jornadas pesca, senderismo, submarinismo y paseos a caballo. Excursiones a Xauen y Asilah. Tardes de lectura en la biblioteca o en el jardín de Blanco Riad. Este norte de Marruecos es una región preciosa entre las montañas del Rif y la costa mediterránea, con puertos deportivos y campos de golf a quince minutos, como Marina Smir, y ciudades con alma, como Tánger, ideal para las compras o una visita a su casino del Mövenpick.
Accesibilidad. El hotel dispone de señalética braille y relieve para mayor comodidad de clientes con ceguera o baja visión. Blanco Riad pertenece a Native, la Red de Hoteles con Encanto y Turismo Accesible. Desde enero dispondrá de una habitación en planta baja, junto al patio interior, con baño adaptado para su uso con silla de ruedas.
Cómo llegar. Desde Tánger en una hora por la carretera de doble vía N-2. Desde Ceuta a 30 minutos por la carretera A6 hacia el sur. Varios autobuses cubren la línea Tánger-Tetuán y Ceuta-Tetuán.
Tarifas
Suite Aicha: 160 euros.
Habitaciones Fátima, Shéhrazad, Meriam, Moraira: 90 euros.
Habitaciones Subh, Leila, Balkis: 60 euros.
Camas supletorias: 20 euros. Precios por habitación doble y por noche con desayunos. Consultar tarifas especiales en la web del hotel.
Contacto y Reservas
HOTEL BLANCO RIAD
5, Rue Zawiya Kadiria
Tetuan (Marruecos)
T. 212 539 704 202
info@blancoriad.com
www.blancoriad.com