El primer ministro belga, Yves Leterme, recibió el jueves el apoyo de su coalición para seguir al frente del gobierno, ante los pedidos de renuncia lanzados por la oposición a raíz de una supuesta presión sobre la justicia en el caso del banco belgo-holandés Fortis.
Si bien reclamaron transparencia en el caso FORTIS <:FORB.BR:>(FORA.AM) los responsables de los cinco partidos de la coalición (liberales y cristiano-demócratas flamencos y liberales, socialistas y centristas francófonos) estimaron que el gobierno "podía continuar funcionando con Yves Leterme al frente", según la agencia Belga.
Varios partidos de oposición de Bélgica reclamaron el miércoles la renuncia de Leterme, luego de que uno de sus colaboradores fuese acusado de haber intentando influenciar a magistrados en el difícil caso del rescate de Fortis.
Leterme publicó una carta en la que admitió la existencia de "contactos" entre sus servicios y un representante de la fiscalía y el marido de una juez a cargo del caso Fortis, aunque desmintió que se haya intentado hacer presión sobre la justicia.
La justicia belga había aceptado el viernes pasado la demanda de varios miles de accionistas minoritarios de Fortis, que exigían ser consultados sobre el desmantelamiento del grupo y su venta parcial al banco francés BNP Paribas.
Todas las decisiones tomadas por el holding Fortis a principios de octubre para hacer frente a la crisis financiera deberán ser aprobadas por los accionistas, falló la Corte de Apelaciones de Bruselas.
El 3 de octubre Fortis, al borde de la quiebra arrastrado por la crisis financiera, cedió la mayor parte de sus actividades en Holanda al Estado holandés.
El 6 de octubre, el Estado belga anunció que vendía al francés BNP Paribas el control del banco en Bélgica y Luxemburgo, cuyos gobiernos quedaron como accionistas minoritarios de esa entidad.
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