
El presidente de Panamá, Martín Torrijos, firmó ayer una ley que convoca un referéndum para el próximo 22 de octubre en el que los panameños decidirán si desean la ampliación del canal interoceánico con la construcción de un tercer juego de esclusas.
Las obras, con un costo estimado oficialmente en 5.250 millones de dólares, se iniciarían el próximo año si los panameños aprueban el megaproyecto. 'Convoco a los tres millones de panameños, en democracia y sin injerencias, su decisión sobre el futuro del Canal' dijo Torrijos.
El mandatario aseguró que en los próximos tres meses se promoverá un 'debate nacional' sobre las conveniencias del proyecto, elaborado por la Autoridad del Canal (ACP), el organismo que administra la vía interoceánica.
El primer ministro de San Vicente y Las Granadinas, Ralph Gonsalves, de visita en la capital panameña, participó como testigo de honor en el acto. El Canal fue construido entre 1904 y 1914 por Estados Unidos, que entregó su propiedad a Panamá el 31 de diciembre de 1999, cumpliendo con los tratados Torrijos-Carter de 1977.
Unos 13.000 barcos usan el canal cada año, pero el tamaño actual de las esclusas no permite el paso de los modernos barcos Post-Panamax, de dimensiones mucho mayores. 'Estamos ante un reto formidable. El mundo ha cambiado y el Canal también debe cambiar para que sea competitivo, eficiente y rentable', señaló Torrijos.