
Texas, el segundo estado más poblado de EEUU, celebra hoy unas primarias marcadas por el creciente peso de los latinos y su tradición conservadora y republicana, en las que Mitt Romney espera apuntalar la candidatura a la presidencia.
Desde comienzo de la década de 1980, Texas ha votado siempre mayoritariamente a favor del partido republicano, y cuenta con dos recientes presidentes de EE.UU como George H. Bush (1989-1993) y su hijo George W. Bush (2001-2009), ambos orgullosamente tejanos.
En 2008, el candidato republicano, John McCain, recibió el respaldo del 55% de los votantes de Texas, mientras que el actual presidente, el demócrata Barack Obama, consiguió el 43%.
El actual gobernador, Rick Perry, también fue uno de los contendientes de la batalla por la candidatura presidencial republicana, y logró encabezar la intención de voto tras anunciar que se presentaba en agosto pasado.
Sin embargo, rápidamente perdió fuelle y decidió abandonar la carrera tras sus malos resultados en las dos primeras etapas de las primarias: Iowa y Nuevo Hampshire.
Poco después, Perry anunciaba su respaldo al ex presidente de la Cámara de Representantes, Newt Gingrich, y tras la renuncia de éste, decidió apoyar a Mitt Romney, el virtual candidato que puede lograr hoy alcanzar los 1.144 delegados necesarios para asegurar su nominación.
Texas es el segundo estado con más delegados, 155, solo superado por California.
A Romney le basta con cerca de la mitad, ya que cuenta con 1.064 delegados, según la web de análisis político Real Clear Politics.
No obstante, Texas, también conocido como el estado de la "Estrella Solitaria" debido a su breve status de independencia entre 1836 y 1945, es conocido por su tozuda personalidad.
Asimismo, la población de origen hispana ha crecido notablemente en las últimas décadas, hasta alcanzar un tercio de la población (más de 8 millones).
Y algunos miembros del partido republicano en Texas se han quejado recientemente de que Mitt Romney se ha implicado poco durante la campaña en el estado, al que apenas ha viajado para realizar actos de recolección de fondos.
"No ha hecho un solo mitin o encuentros con las bases. Creo que da a Texas por hecho", se lamentaba Steve Munisteri, presidente del partido republicano de Texas, este fin de semana en el diario "Houston Chronicle".
Romney solo tendrá en frente a otro tejano ilustre, Ron Paul, congresista ultraliberal de 76 años, quien pese a anunciar que suspendía la campaña activa hace unas semanas por falta de recursos señaló su intención de seguir en la pelea por la nominación.