TOULOUSE, Francia (Reuters) - La policía francesa intensificó el martes la búsqueda de un hombre que asesinó a tiros a tres niños y un rabino en una escuela judía y que grabó los crímenes por temor a que ataque de nuevo.
Las autoridades creen que el asesino, quien huyó en moto, es un pistolero entrenado con opiniones "extremistas". Se cree que también puede ser responsable de los asesinatos de tres soldados de origen magrebí ocurridos la semana pasada.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, dijo que el racismo parece ser la motivación del ataque del lunes contra la escuela, que se produjo apenas cinco semanas antes de la primera vuelta de la elecciones presidenciales.
Los ataques racistas y antisemitas no son raros en Francia.
Los inmigrantes y el islam han sido los principales temas de la campaña, mientras Sarkozy intenta ganarse a los votantes de ultraderecha a la líder de ese sector, Marine Le Pen. Los analistas dicen que el tiroteo podría transformar el debate electoral y posiblemente baje el tono de la retórica populista.
"Vamos a encontrar a este monstruo. Lo encontraremos, lo llevaremos ante la justicia y será castigado", dijo el ministro de Asuntos Exteriores, Alain Juppé, a la cadena de televisión France 2.
Francia es el hogar de las mayores comunidades judías y musulmanas de Europa y tiene un historial de agresiones contra ambos grupos, pero el tiroteo del lunes fue el ataque antisemita más mortífero en suelo francés en casi 30 años.
La policía reforzó la seguridad en los lugares de culto, elevó la alerta terrorista en la ciudad del sur del país al nivel más alto posible e interrogó a los encargados de clubes de armas de fuego en un esfuerzo por encontrar al asesino.
"Sería sorprendente si parara ahora", dijo a Reuters un oficial de policía implicado en la investigación.
Las cintas de vigilancia de la escuela mostraron que el atacante registró su tiroteo con una pequeña cámara de vídeo que llevaba colgada del cuello.
"Esto muestra un perfil del asesino, alguien que es muy frío, muy decidido, con gestos precisos, y por lo tanto muy cruel", dijo el ministro del Interior, Claude Guéant.
El sujeto es también el principal sospechoso del asesinato de tres paracaidistas en dos tiroteos separados ocurridos la semana pasada en Toulouse y la cercana ciudad de Montauban. En cada ataque, el asesino llegó en una moto Yamaha robada y utilizó un arma de fuego Colt 45. Llevaba el rostro oculto por un casco de motorista.
Entre los muertos había dos integrantes del regimiento paracaidista 17. La policía ha interrogado a tres antiguos paracaidistas expulsados por actividad neonazi en 2008, pero una fuente policial dijo a Reuters el martes que han sido descartados.
ANTES DE LA ORACIÓN
A la entrada de la escuela judía Ozar Hatorá en Toulouse, un edificio de ladrillo de cinco plantas ubicado en un barrio residencial, padres y vecinos dejaban ofrendas florales y velas en recuerdo de las víctimas.
Un niño que sobrevivió al ataque habló de sus sentimientos de terror mientras el asesino disparaba en la escuela.
"Nos estábamos preparando para la oración cuando el director irrumpió y gritó que había un tiroteo. Me entró el pánico, huí (...) y escuché los disparos, pero no vi nada", dijo el niño de 11 años a la radio France Info.
"Pensé que iba a venir en cualquier momento y terminar con todos nosotros. Entonces esperé y esperé, y luego mi padre me vino a buscar", dijo.
Las escuelas en toda Francia guardaron un minuto de silencio.
"Esto ocurrió en Toulouse, en una escuela religiosa con niños de familias judías, pero podría haber sucedido aquí. El mismo asesino podría haber venido aquí, estos niños son exactamente iguales a vosotros", dijo Sarkozy al asistir a una vigilia silenciosa en una escuela de París.
Los cuerpos de las cuatro víctimas, que tienen doble nacionalidad franco-israelí, iban a ser repatriados a Israel, dijo Joel Mergui, jefe de una organización religiosa judía.
La embajada israelí identificó a las víctimas como Jonathan Sandler, de 30 años, sus hijos Gabriel y Arieh, con edades entre cuatro y cinco, y Myriam Monsonego, de siete años.
TENSIÓN RACIAL
El Consejo Representativo de Instituciones Judías en Francia (CRIF) dio la bienvenida a la decisión de los partidos políticos de suspender su campaña electoral hasta el miércoles por respeto a las víctimas. Los analistas dijeron que los asesinatos cambiarán el debate electoral.
"El tono de la campaña no puede volver a lo que era", dijo a Reuters Dominique Reynie, jefe del instituto político Fondapol.
"La campaña estuvo dominada por un tono agresivo y un alto grado de retórica populista. Esta retórica cesará", agregó.
La líder de ultraderecha Marine Le Pen está en el tercer puesto en la carrera por la presidencia y esto ha ayudado a que ganen notoriedad en la campaña electoral los temas raciales y la inmigración.
Sarkozy, de centroderecha, ha tratado atraer votantes con la promesa de reducir a la mitad la inmigración y algunos analistas dijeron que habría una discusión sobre si el mandatario despertó sentimientos que llevaron al ataque.
"Habrá un mayor debate (...) sobre si la tensión creada en la sociedad por Nicolas Sarkozy y la UMP (partido gobernante) provocó de alguna manera o facilitó este tipo de violencia", dijo el editor de la revista L'Express Christophe Barbier.
Sin embargo, Juppé dijo que la campaña no desencadenó el tiroteo. "El antisemitismo existe en Francia, hemos luchado (contra esto) por años", señaló.
"Nadie debe tratar de beneficiarse de alguna manera de este drama, que no está de ninguna manera vinculado a la campaña electoral", agregó.
/Por John Irish/
Relacionados
- La policía gala busca al autor del tiroteo en una escuela judía
- Un individuo mata a un profesor y tres alumnos en una escuela judía de Toulouse
- Francia.- Oleada de condenas por el asesinato de un profesor y tres alumnos de una escuela judía de Toulouse
- Israel "consternado" por el tiroteo delante de una escuela judía de Toulouse
- Miles de policías trabajan en la captura del responsable del tiroteo de la escuela judía de Toulouse