
El presidente ruso, Dmitri Medvédev, ha propuesto a la Duma o cámara de diputados rusa que endurezca las penas de cárcel contra los terroristas, sus cómplices y sus partidarios.
Medvédev remitió a los diputados un proyecto de ley que incluye modificaciones en tres artículos del código penal, según informó el Kremlin en un comunicado.
Actualmente, el artículo 205 prevé penas de entre 8 años y cadena perpetua para los autores de atentados terroristas; mientras el 205-1 castiga con 4-15 años de cárcel por complicidad con banda armada.
Además, el artículo 205-2 incluye multas y penas de hasta cinco años de prisión para aquellos que apoyen públicamente la comisión de atentados, los justifiquen o enaltezcan el terrorismo.
Campaña contra el terrorismo
La propuesta de Medvédev se enmarca en la nueva campaña antiterrorista lanzada por el Kremlin tras los dos salvajes atentados suicidas perpetrados en marzo pasado contra el metro de Moscú y que costaron la vida de 40 personas.
Medvédev ha ordenado al Servicio Federal de Seguridad (FSB, antiguo KGB) que no tenga compasión con los terroristas y sus cómplices.
"Aquellos que ofrezcan resistencia deben ser aniquilados, sin compasión alguna", dijo.
Los cuerpos de seguridad rusos centran su atención en la búsqueda y captura de viudas negras, es decir, esposas o familiares de guerrilleros caucásicos muertos por las fuerzas federales rusas.
Atentados suicidas
Precisamente, viudas negras cometieron el pasado 29 de marzo en hora punta los atentados suicidas en las estaciones del metro moscovita de Park Kultury y Lubyanka.
Ambas mujeres suicidas se subordinaban directamente al líder islamista de Chechenia, Dokú Umárov, quien reivindicó los ataques terroristas en la capital rusa y prometió extender la guerra por todo el país.