Sobre la mesa de los Gobiernos de muchos países, sobre todo naciones europeas y Estados Unidos, hay planes anti déficit y deuda cuajados de propuestas impopulares, entre la que destacan sensibles subidas de impuestos. Sin embargo, no todo el mundo ve con malos ojos esta medida. De hecho, hay un grupo de multimillonarios que, paradójicamente, hace años que piden pagar más, según la web MarketWatch.
Uno de esos super ricos es Mike Lapham, cuyo bisabuelo, Samuel Pruyn, fundó una fábrica de papel en Nueva York, en 1865. Lapham recibió una buena tajada de la abultada cifra que recibió la familia cuando vendió el negocio en 2007, lo que les ahorró además un dineral, gracias a los recortes de impuestos de la era Bush. Sin embargo, este multimillonario empresario no considera que sea justo que él tenga que pagar menos impuestos.
Desde 1996, Lapham ha formado parte de un grupo activista con sede en Boston llamado 'Unidos por una Economía Justa' (United for a Fair Economy), en el que es co fundador y director del proyecto sobre Riqueza Responsable.
No fomentan el empleo y aumentan el déficit
"Esas rebajas de impuestos (realizadas durante el Gobierno de Bush) estaban destinadas a liberar grandes cantidades de capital e impulsar las inversiones, provocando al tiempo un goteo de crecimiento económico", recalca Lapham, que añade que tal y como han documentado United for a Fair Economy y otros, "esos recortes no ayudan a crear empleos. Y, sin embargo, los empleos siguen utilizándose como excusa para proponer el cobro de menores impuestos".
Además, esa decisión, "en vez de crecimiento económico, lo que ha conseguido es añadir 2,5 billones de dólares a nuestra abultada deuda nacional, que ahora ronda los 13 billones de dólares", sentencia.
Propósitos de enmienda
Ahora, Lapham y otros millonarios de la asociación han firmado el llamado Responsible Wealth Tax Fairness Pledge, una promesa por la que se comprometen a donar parte de lo que se ahorraron por la rebaja de impuestos de años anteriores a organizaciones que, o bien se opusieron a esa medida, o bien trabajan para lograr justicia social y económica.
Cualquiera que se sienta culpable por los impuestos que paga, siempre puede meterse en la web del Departamento del Tesoro y hacer una donación para ayuda a pagar la deuda nacional, apunta el portal financiero de Wall Street Journal, que señala con ironía que "si unos pocos cientos de millones de personas donaran unos 42.000 dólares por cabeza, la podríamos pagar entera sin problemas".
Lo importante es que, aunque estos ricos estadounidenses se están limitando a apoyar a organizaciones que hacen poco más que criticar el endeudamiento público, su verdadero objetivo es impulsar un cambio de mentalidad y del marco impositivo, para que todas las personas con una economía muy boyante paguen más, no sólo ellos.