
Las dos, tanto la Generación X como la Y, lo van a pasar mal, porque son jóvenes y, por tanto, más vulnerables a la crisis. Sus despidos son los más baratos y ellos tienen menos experiencia, lo que los hace más prescindibles que sus compañeros senior. Pero, ¿qué edades tienen estos trabajadores?
Aunque los expertos no se ponen de acuerdo, una de las teorías más firmes es que a la Generación X pertenecen los nacidos entre 1961 y 1979 y a la Y a partir de 1980. Los baby-boomers, por su parte, serían mayores que los miembros de la Generación X, y habrían nacido entre 1946 y 1960.
Ahora bien, ¿hay una de ellas que se defienda mejor de los baches económicos? Ambas tienen diferentes puntos a su favor para enfrentarse a la situación actual y lo ideal sería que apareciera una tercera generación sin edad concreta que reuniese lo mejor de las otras dos. Éstas son las armas de unos y otros:
Madurez
Está, evidentemente, a favor de la Generación X. Son más realistas y tienen más experiencia profesional, algo que puede mantenerles atados a la empresa. Según Nekane Rodríguez, directora general de Creade (la consultora especializada en recolocación y recursos humanos del Grupo Adecco): "Lógicamente, la Generación X ha vivido la crisis de 1992 y la Y ninguna, así que está en una coyuntura de mercado que le resulta desconocida". La experiencia es un grado: "Hay miembros de la Generación X que llevan toda la vida en el mismo trabajo y otros que se han movido de unas empresas a otras". En ambos casos, esas vivencias pueden repetirse ahora.
Formación
En este punto, los nacidos a partir del 79 ganan a sus hermanos mayores. Juan Carlos Jiménez, profesor de Sociología en la Universidad San Pablo CEU, explica: "Éste es el factor que más juega a su favor. En algún momento puede resultarles frustrante, pero será diferenciadora a largo plazo. Aunque sufra más paro, la Generación Y será la que mejor se incorporará al mercado en esta situación económica".
Más formación también significa mayor capacidad de adaptarse a los cambios, ya que "los estudios también te cualifican humanamente. El joven que corta maderas, corta maderas y punto, pero una persona preparada puede ampliar sus horizontes". Los idiomas son otro punto a su favor y facilitan los cambios de un país a otro. Pese a todo, en 2008 las estadísticas revelaron que, por primera vez, los estudios universitarios no garantizan un mejor puesto.
Capacidad de sacrificio
Se supone -al menos, ésa es la teoría- que la Generación X siente más respeto por el trabajo y está más dispuesta a sacrificarse. Nekane Rodríguez señala que "sus valores vienen de la mano de las personas que los han criado y la sociedad en la que se han educado. Tanto a la Generación X como a los baby boomers los criaron personas cuya infancia estuvo marcada por la cultura de la posguerra: austeridad, esfuerzo y un trabajo para toda la vida".
Pero esa percepción del empleo que dura para siempre ha cambiado y los más jóvenes, que han crecido en la sociedad del bienestar, con pleno empleo y acceso a la información, se han mostrado dispuestos a cambiar de empresa para mejorar sus condiciones. Hasta ahora, se han permitido el lujo de elegir entre varias ofertas -algo impensable para los X- y de exigir tiempo libre y flexibilidad. Nada extraordinario en realidad, sencillamente una vida equilibrada. Según Gayle Allard, profesora de Economía de IE Business School: "La Generación Y es más egocéntrica, a la vez que ambiciosa. Quieren seguridad, buen salario... ¡todo!".
Sin embargo, las cosas están cambiando. "Para ellos, la crisis está siendo una fuerte dosis de realismo, ya que, con la tasa de paro tan alta, no podrán aspirar a todo lo que desearían". De hecho, las exigencias de los jóvenes Y ya se han reducido considerablemente.
Iniciativa
Los miembros de la Generación Y son más lanzados, dice Allard: "Aunque no sea una diferencia muy llamativa, tienen más iniciativa que los de la Generación X, son más emprendedores; y en un momento de crisis es esto lo que hace falta, ganas de trabajar y mucha paciencia". Este factor sí es más acentuado respecto a los baby boomers; éstos "sí tienen mucha menos iniciativa y esperan poco de su trabajo. Menos estabilidad, menos ingresos, menos promoción...".
Libertad total
Los jóvenes miembros de la Generación Y cuentan con la ventaja de que, en principio, tienen menos cargas que los X; muchos no están hipotecados sino que viven de alquiler, y la mayoría de ellos no tiene hijos. No debe olvidarse que los más viejos de este grupo tienen ahora 29 años.
Redes sociales
Este factor también ayudaría más a la Generación Y, que es la que tiene casi más vida en Internet que fuera de ella. Facebook, LinkedIn, MySpace, Tuenti, Twister... son redes sociales a través de las cuales estos jóvenes se relacionan, a nivel personal y profesional, y establecen vínculos laborales. Sin embargo, algunas de estas redes -sobre todo, las profesionales, como LinkedIn- ya las manejan también muchos X y baby boomers.