Herbie es como le gusta que le llamen y como le conocen en Tarifa. Es uno de los socios de la marca El niño Tarifa.
Surfero hasta la médula, Herbert Newman montó su primera tienda de ropa para los amantes de este deporte con tan sólo 19 años. Ahora tiene "cuarenta y tantos", dice, y siempre tuvo "en mente la idea de crear una linea de ropa de este estilo para distribuir", comenta.
Austriaco de nacimiento, vino a España con 10 meses y en 1999 se unió a un suizo y un español para poner en marcha la marca de este niño travieso.
Su nombre
Pero ¿de dónde surge un nombre como éste? "La marca tiene su historia, hay dos líneas, aquí en Tarifa al viento de levante y al que sopla en la montaña se le llama el niño, por eso le pusimos ese nombre", matiza Herbie.
Lo que comenzó siendo un sueño se ha convertido en una realidad palpable. Actualmente es un negocio a nivel internacional. "Cuando comenzamos sólo teníamos un local que yo me encargué de adecuar en un 80 por ciento, es decir, hice el trabajo físico de crearlo". Desde ese momento todo el negocio se encaminó hacia el triunfo y es que "la gente nos pedía nuestras camisetas para su tienda y no dábamos abasto".
El niño Tarifa tuvo un rápido lanzamiento, comenzó vendiendo en 37 puntos de España por medio de siete franquicias que se tuvieron que abrir debido al éxito del negocio. "Hoy día surtimos de nuestros productos a más de 700 puntos e incluso vendemos en Italia y Portugal; próximamente abriremos mercado en Holanda", comenta orgulloso el socio.
El boom por publicidad
El niño Tarifa abarca aquellos productos destinados a surferos y gente playera. El target al que se dirigen es de gente joven, dinámica. Son varias las marcas que apuntan hacia este tipo de público. "Estamos entre medias de dos de las marcas más conocidas de surferos: QuikSilver y RipCurl".
A pesar de que no necesitaron publicitar sus camisetas para obtener muy buenos beneficios, "el boom fue cuando MªJesús (entonces dependienta de la tienda y actualmente su mujer) tuvo la idea de incluir la marca en la televisión. Ahí estalló todo porque empezó a aparecer en series de televisión y en el Club Disney", cuenta Herbie.
No tenían capacidad para abarcar lo que se les venía encima, por ello decidieron licenciar la marca y que la empresa "El secreto del mar" se dedicara a vender, diseñar, "ellos son quienes hacen el trabajo". Y es que Herbie y los entonces socios de la empresa, no pensaron que El Niño fuese a convertirse en un producto tan rentable. "En un principio los tres socios invertimos 18.000 euros cada uno, hoy día la tienda de Tarifa factura 1.200 millones de euros y El secreto del mar 25".
Su imagen de marca
En cuanto a la decoración de la tienda tanto la tienda de Tarifa como la de Madrid tienen la misma: todo revestido de madera, con tabas de surf colocadas estratégicamente y otros abalorios relativos al deporte acuático.
Pero si algo caracteriza a la ropa de El Niño son sus colores ácidos y vivos, su línea sencilla pero moderna, su inspiración surfera y los tejidos de gran calidad. Están confeccionadas en algodón al cien por cien con un prelavado que garantiza el que las camisetas no encojan.
Además de sus famosas camisetas, venden sudaderas, bañadores, bermudas y bikinis. También hay accesorios como llaveros que rondan los 10 euros y pegatinas del logo. Pero El niño Tarifa no sólo viste a los más jóvenes sino que han diseñado una moderna línea de trajes para niños, exactamente igual a la de los jóvenes pero adaptada a ellos.
Este es un ejemplo más de que quien la sigue la consigue. Herbie tenía un sueño y hoy día ha conseguido que miles de adolescentes reconozcan al "niño travieso".