
A muchas franquicias que, en tiempos de bonanza, apostaron por los locales amplios, les sobra hoy espacio. Por ello, las enseñas están reduciendo la superficie mínima de sus locales para limitar la inversión del franquiciado y, así, seguir creciendo. Ésta es una de las tendencias que ha experimentado el sector en los últimos tres años, marcados por la crisis económica.
Recortando la superficie a la mitad, la inversión cae fácilmente un 25%, según estima Xavier Vallhonrat, el presidente de la Asociación Española de Franquiciadores. Por otro lado, el 42% de los locales abiertos en 2010 supuso una inversión inferior a 60.000 euros, de acuerdo con los datos del informe Situación actual de la franquicia en España 2011, que fue presentado ayer.
Eduardo Tormo, presidente de la consultora Tormo & Asociados, comentó que son muchos los sectores que están encogiendo; entre ellos, la restauración, uno de los más caros: "Si antes se requerían locales de al menos 500 o 600 metros cuadrados, ahora con 150 metros se considera suficiente". Otra de las opciones que está ganando peso son los corners dentro de superficies comerciales y el trabajo desde casa, sin necesitar siquiera un local.
Xavier Vallhonrat añade: "Lo que ocurre es que no hay financiación, de modo que sólo son viables aquellos proyectos que exigen una cantidad de entre 30.000 y 40.000 euros que, lógicamente, implican un espacio más reducido". Curiosamente, afirma, "los emprendedores con poco dinero son mucho más valientes a la hora de invertir, y si reúnen el dinero se lanzan; sin embargo, los que tienen 300.000 euros no se atreven".
Con valentía o sin ella, el sector aguantó el chaparrón el año pasado, según los datos de Mundo Franquicia, que revelan que el autoempleo fue esencial para la franquicia el año pasado, y que a finales de 2010 el sector daba trabajo a 233.000 personas. Según los datos de Tormo & Asociados, en 2010 se crearon 87 nuevas enseñas, hasta los 65.800 establecimientos (3.000 más que el año anterior), aunque la facturación ascendió a 19.000 millones de euros, un 0,5 por ciento menos. El empleo también se redujo levemente, ayudado por la reducción del espacio comercial. Tormo espera que este año sea mejor, pese a que reconoce que "veremos cierres sonados y algunas empresas tendrán que dejar de crecer".
Al banco de la mano
Una tendencia aún incipiente cobra fuerza en España: la implicación de las centrales en la búsqueda de financiación. Esta práctica, ya arraigada en países como Estados Unidos a raíz de la crisis, es aún residual aquí, aunque las grandes marcas ya recurren a ella.
La idea esencial es que enseña y franquiciado vayan de la mano a un banco con el que la primera ha firmado un convenio previo: le ha dado a conocer su proyecto, la viabilidad de sus establecimientos y la inversión que requiere la apertura de uno de ellos. La marca acude a la entidad acompañada de un emprendedor cuyo perfil le interesa y, juntos, piden el crédito para la apertura de un local. Además de contar con el apoyo de la marca de cara a la entidad, los trámites se agilizan enormemente: de las tres o cuatro semanas que podría tardar en concederse el préstamo, se pasa a sólo unos días. Así se están consiguiendo préstamos que, por otra vía, serían imposibles de obtener, según comenta Eduardo Tormo.
Lejos han quedado los tiempos en los que un emprendedor con 20.000 euros en el bolsillo conseguía fácilmente un crédito de 300.000 euros. "El problema de aquel sistema era que, evidentemente, ante el primer problema el negocio se venía abajo", añade el presidente de Tormo & Asociados.
Otro de los aspectos importantes, según el presidente de esta consultora especializada, es la claridad entre ambas partes. Con frecuencia, asegura, las enseñas "no preguntan abiertamente al franquiciado cuál es su disponibilidad de efectivo o con qué garantías cuenta". Según comenta, algunas centrales manejan cientos de candidatos y, cuando encuentran a uno cuyo perfil se adecúe a lo que buscan, realizan todo el proceso sin pararse a abordar un asunto tan esencial como éste. Hasta que, llegado el momento clave, no hay dinero.
Por otro lado, Tormo & Asociados presentó ayer, junto al informe sectorial, el ranking de las 50 mejores franquicias 2010; la gran mayoría de ellas se crearon hace décadas.