El precio más barato es el de Reino Unido, que es de tres euros, frente a la Costa Azul, que es de doce
Ir a la playa sin quemarse y poder estar como en casa cuesta de media ocho euros diarios, un precio que en plena crisis pocos están dispuestos a pagar. En la mayor parte de nuestras playas se paga cuatro euros por alquiler de hamaca y otros cuatro más si se quiere con sombrilla.
A pesar de estos precios, los hay desorbitados en zonas como Marbella donde se pagan 250 euros por el servicio de tumbona, sombrilla y un extra de camarero y botella de champán. Pero España no es de los destinos más caros.
En la Costa Azul se pagan doce euros de media por tumbona, la alternativa más cara de Europa. La más barata es la de Reino Unido, que cuesta tres euros, aunque la oferta del sol, que es gratuita, nunca está asegurada.