Gastronomía y turismo se dan la mano en el Tomb de les Neres. Porque si bien este camino por el interior de Andorra es una magnífica ruta para los amantes del senderismo, también nos ofrece en este final de octubre una excelente oportunidad para recolectar exquisitas setas y, por supuesto, saborearlas siguiendo el recetario local.
Es tiempo de setas. Y el Tomb de les Neres es un entorno idóneo entre las muchas rutas y senderos de montaña del Principado. Un camino de trazado sencillo, bordeado por estas suculentas plantas con las que la naturaleza tiene a bien regalarnos la mesa en otoño. Rebozuelos, neguillas, níscalos, rovellons... Un descubrimiento que cada año despierta al gastrónomo más adormecido.
El recorrido es perfecto para la búsqueda y recolección de setas, ya que el suelo está húmedo a la sombra de los árboles, lo que propicia abundancia de material. Son aproximadamente 8 kilómetros que podemos realizar en unas 3 horas, atravesando las parroquias de Canillo, Encamp, Ordino y La Massana.
Para facilitar el trayecto y evitar que nadie se despiste, al inicio del recorrido hay un panel de orientación panorámica que nos introduce en el Bosc de la Tosa. Más adelante se alcanza la Font del Mallol, en La Massana, un buen lugar para hacer un alto en el camino y rellenar de agua las cantimploras. Después se continúa por la Solana de Encamp y la zona de Bartra, hasta alcanzar la Collada del Estall, un prado abierto y amplio. Al culminar el trayecto nuestra cesta estará rebosante de setas.
Ya puestos lo suyo es prepararlas, pero quien no se anime debe saber que hasta el 31 de octubre La Massana está celebrando jornadas gastronómicas La Massana Fogons. Los restaurantes de la parroquia (El Molí de Fanals, L'Eulari de Pal, Cal Silvino...) ofrecen a los visitantes distintos menús elaborados con productos andorranos de temporada y, claro está, las setas están entre los protagonistas. ¡Que aproveche!
