
El Barcelona acometerá, a partir de 2019, las obras de remodelación del Camp Nou (si no hay retrasos inesperados) para dar a luz un nuevo estadio. No se contemplaba en un primer momento, pero ahora cabe la posiblidad de que, antes de que empiecen dichas obras, el coliseo culé tenga un nuevo nombre.
Según informa SPORT, la entidad blaugrana ya está trabajando para que una empresa añada su nombre al del estadio a cambio de una suculenta suma de dinero. La cantidad que se estima puede rondar los 200 millones de euros, una importante inyección económica para un club con unos presupuestos asfixiados por la gran masa salarial del vestuario.
Diversas empresas ya se han interesado por la opción y han insistido en que el acuerdo se cierre para la próxima temporada. El Barcelona no pretende dejar escapar la oportunidad y tratará de que, en la temporada 18/19, el Camp Nou tenga un nuevo apellido.
Para ello, tendrá que someter el acuerdo al veredicto de los socios, que tendrán la última palabra en una asamblea extraordinaria que se prevé para el primer semestre de 2018.
Previamente, necesitará el 'sí' del Espai Barça, proyecto integral del que el nuevo Camp Nou formará parte. Una aceptación que se sobreentiende, ya que el dinero recibido por el nombre del estadio será importante para la consecución de este Espai Barça. Pero la máquina ya ha echado a andar.