Cristiano Ronaldo tiene un problema en la rodilla derecha. La lesión que se produjo en la final de la Eurocopa todavía le tortura hasta tal punto que el delantero ha tenido que perder tres kilos para no acabar de destrozarse la articulación.
Cuenta el diario As que en el Bernabéu están preocupados por su estado más allá del posible roce que protagonizó con Zidane en el duelo entre Las Palmas y Real Madrid. Afirman desde las oficinas de Concha Espina que no CR7 estaba mosqueado consigo mismo y no con Zidane, con quien mantiene buen rollo.
Otra cosa es su salud. Y ahí la perspectivas no son muy positivas porque Cristiano no termina de rendir en el terreno de juego como antaño. Es verdad que apenas ha hecho pretemporada y que su verano se ha enfocado a estar a tope, pero CR7 siempre ha hecho goles, incluso en los partidos de preparación.
Ahora, sin embargo, no moja. Suma sólo dos goles esta temporada en los cuatro partidos que ha jugado. Un porcentaje escaso para las habituales goleadas que solía protagonizar. Además, al de Madeira le cuesta esprintar o regatear incluso al nivel de las últimas temporadas, cuando había perdido algo de chispa en ambas virtudes.
Mañana en Alemania, en la Champions League, jugará de inicio. Será una buena oportunidad para ver si recupera parte de esas características o si sigue sufriendo las consecuencias del desgaste físico.
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