Cristiano Ronaldo realizó ante el Wolfsburgo uno de sus partidos más completos con el Real Madrid. Al '7' blanco se le vio muy enchufado desde el primer momento, además de meter a su equipo entre los cuatro mejores equipos durante seis años consecutivos con un nuevo 'hat-trick'.
Desde el himno de la Champions League ya se vio a un Cristiano Ronaldo diferente, más motivado de lo normal. Su gesto daba seguridad y era el comienzo de lo que a la postre sería uno de sus mejores días como jugador del Real Madrid.
Cristiano sabía que este partido se decidiría por pequeños detalles, por eso cualquier saque de banda era importante sacarlo rápido para intentar sacar ventaja con sus rivales. Así lo hizo el portugués en un par de ocasiones.
Con el 3-0, Cristiano Ronaldo empujó más que nunca al Santiago Bernabéu. Sabía que los últimos minutos eran clave y no paró de animar y levantar sus brazos para provocar la reacción del estadio. Y lo hizo.
A poco para el final Cristiano Ronaldo se vino al centro para dejarle la banda a Jesé. El canario estaba fresco y era buena opción para los últimos minutos, pero en un momento Cristiano le hizo un gesto a Jesé para que no dejara de presionar. Se notaba que Cristiano estaba muy dentro del partido.
El crack portugués cuajó uno de sus partidos más completos y, por primera vez en mucho tiempo, ejerció de líder del Real Madrid, algo que el equipo echaba muy en falta. Buena prueba de ello fue el mensaje que le dedicó Arbeloa en el balón firmado que se llevó el luso: "Esto sí que es un líder".
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