
Dani Alves suma 32 años, pero su rendimiento deportivo parece haberle devuelto a un tiempo pasado en el que su pasaporte mostraba bastantes años menos. El lateral derecho del Barça está viviendo una segunda juventud que le está devolviendo a su versión más brillante, esa que llevó a ser el mejor lateral derecho del planeta.
Un retorno a tiempos mejores que parecía imposible hasta hace muy poco tiempo. Hace apenas un año, su continuidad en el Barça parecía más cosa de una obligación contractual que de un verdadero mérito adquirido en los entrenamientos o en los partidos que disputaba.
El hecho de que el Barça no pudiera fichar hasta enero de 2016 le mantenía vivo en un club que de otro modo le habría abierto la puerta hace tiempo. De hecho, su renovación no se cerró hasta finales del curso pasado, después de un tenso tira y afloja entre ambas partes en el que incluso ejerció un papel protagonista Luis Enrique.
El asturiano apostó decididamente por el ex sevillista en sus alineaciones. Lo hizo por delante del 'olvidado' Montoya y de un Douglas que jamás le hizo sombra. Lo hizo pese a que en ese comienzo de la era Luis Enrique, Alves no jugó de él se esperaba. Su declive venía años certificándose. Y ésta parecía ser su última temporada para demostrarlo.
Pero no sucedió de este modo. Más al contrario. Poco a poco, Alves fue recuperando su fútbol y acabó el curso como un tiro. Tanto es así, que Luis Enrique presionó para que continuara al tiempo que exigía la llegada de un sustituto. Aleix Vidal fue el escogido, aunque el también ex del Sevilla no ha podido aún debutar. Lo hará en el mes de enero.
Entre tanto, Sergi Roberto se ha convertido en el recambio de Alves para aquellos días en los que no podía jugar por lesión. El canterano también lo ha bordado. Una doble competencia (Sergi en los partidos, Aleix en los entrenamientos) que ha mantenido en alerta a Alves hasta, no sólo mantener el nivel del año pasado, sino mejorarlo aún más si cabe. Este sábado, ante la Real Sociedad, dos centros nacidos de sus botas le pusieron a Neymar y Suárez los dos primeros tantos.
Siete días atrás, en el Bernbéu, había vuelto loco a la defensa del Real Madrid. Dos exhibiciones que le congratulan con su fútbol de calidad. Ahora queda por ver si con la inscripción de Aleix Vidal, el '6' blaugrana mantiene el puesto o si la competencia del español le manda a un banquillo que, a día de hoy, no merece visitar. No a este nivel. No con este futbol.