
En una sonada rueda de prensa, Florentino Pérez salió a la palestra para defender a Rafa Benítez tras el contundente 0-4 infligido por el Barcelona en el Clásico del pasado sábado. El presidente blanco hizo público el apoyo unánime de la junta directiva, pero siguen quedando las dudas de no pocos sectores sobre la naturaleza y fiabilidad de esta defensa.
Esta incertidumbre se refleja en la prensa, en parte de los aficionados...y es que los precedentes no son positivos para el entrenador madrileño. Solo hay que ver el caso de Carlo Ancelotti, llamativo por la enconada defensa que hizo de él en el mes de marzo. El final es conocido por todos: fue despedido, poco más de dos meses después, a pesar de la oposición de los jugadores.
Incluso fuera de España se percibe el apoyo de Florentino Pérez como un arma de doble filo. El último en hacerse eco de esto ha sido Steven Gerrard, un viejo conocido de Rafa Benítez y con el que tampoco tuvo una especial afinidad. La frase que pronunció el ex del Liverpool en BT's Sport, canal en el que comenta la Champions League, resume esta sensación: "Le han dado un voto de confianza, y suelen ser mortales en el Real Madrid, tenemos que esperar y ver".
Claro como pocos el mediocentro inglés, que incide sobre un aspecto que planeó el panorama futbolístico nacional: que la palabra de Florentino Pérez no le hipotecaba de cara a una decisión completamente diferente solo unos meses más adelante.
"Es un buen manager. Yo sólo me pregunto cómo está siendo su relación con los grandes jugadores en el vestuario, porque desde fuera parece un poco rota ahora mismo. El tiempo nos dirá cuánto dura", dijo el jugador. Exactamente, será el tiempo el que quite al razón a unos o a otros.