Jonathan Barnett es el agente de Gareth Bale. Un personaje público más conocido en el Reino Unido que en España, aunque sus declaraciones están abriéndole un espacio en la actualidad deportiva española, eso sí, a golpe de polémica no en todos los casos beneficiosas para su representado, para Bale. Este agente FIFA de 65 años cargó este lunes contra Cristiano Ronaldo al afirmar que él y Bale no se llevaban mal, pero que el galés no aspiraba a ser el jugador que más ropa interior vende, en una referencia que no ha gustado en el seno del Real Madrid. No es la primera vez que algo así sucede. Barnett es especialista en meter en problemas involuntarios a su jugador e incluso al Real Madrid.
Hoy el diario As se ocupa de hacer una reseña de sus declaraciones y entre ellas, algunas complicadas de digerir en Concha Espina. Así, por ejemplo, cuando Bale fichó por el Real Madrid allá por 2013, el club se empeñó en desmentir que el traspaso costase más de los 96 millones de euros que costó Cristiano Ronaldo.
El objetivo era mantener el estatus del luso como el jugador más caro de la historia del fútbol. Pero entonces llegó Barnett y confirmó lo que medios ingleses ya habían filtrado. Bale costó 101 millones, no 91 como se contaba en la capital.
Fue el primer encontronazo de unos cuantos más. Así, por ejemplo, en 2014 dejó entrever que Bale, al contrario que todos los jugadores, no había aceptado compartir el 50% de sus derechos de imagen con el club. "Eso lo dirá usted. Soy un negociador muy bueno...", respondió ante esta fórmula.
No fue, con todo, las declaraciones que más revuelo generaron. En mayo de 2015, en los prolegómenos de que el Real Madrid se jugasen la participación en la final de la Champions, Barnett habló. Y generó inestabilidad de puertas hacia adentro. "Sus compañeros en el Madrid tienen que pasarle más el balón para que pueda demostrar lo bueno que es. Bale podría haber ido al despacho de un directivo, pero no quiere molestar a nadie", comentó entonces en 'The Telegraph'.
Barnett acusó, en definitiva, a los compañeros de Bale, de ser egoístas y aislar a un jugador que, por cierto, había tenido algunos roces con hombres como CR7 por no ceder la bola cuando pudo hacerlo en claras oportunidades. Ancelotti le respondió con unas de las declaraciones más rotundas que se le recuerdan en el Real Madrid. "Mejor que se hubiera quedado mudo", afirmó entonces el preparador blanco.
"El agente de Bale nunca ha ido un entrenamiento nuestro. No conoce nuestro ambiente. Habla desde fuera. Bale nunca tuvo problemas con sus compañeros. Nunca sus compañeros tuvieron problemas con Bale. Se quieren mutuamente. Podría quedarse callado. Habría sido mejor", dijo en sala de prensa.
Pero Barnett no se rindió. Tiempo después acudió a las oficinas del Bernabéu y reclamó que Bale tenía que jugar más centrado, justo donde ahora está ubicándolo un Rafa Benítez al que también ha dejado en mala posición al afirmar que el '11' merengue ahora está en una posición correcta casi más por aquella reunión que por sus criterios. Más porque hay que darle importancia a Bale frente a Cristiano Ronaldo que porque realmente sea donde sacarle más partido.
"Creo que está llegando la nueva guardia [en referencia a jugadores con más peso como Bale] y tal vez haya algo de resentimiento por ello. Pero creo que las cosas cambiarán. Gareth juega ahora en una posición mejor, donde quiere hacerlo", dijo en The Guardian, donde también habló de aquel roce con Ancelotti (además de hacer las mencionadas declaraciones sobre Cristiano y la ropa interior).
"Hice un análisis y era verdad. Sé que Ancelotti me echó la bronca por ello, pero yo sigo siendo agente y él ya no es entrenador del Real Madrid. Eso quiere decir que uno de nosotros tenía razón", añadió en referencia a aquel episodio.
Otro roce que deja a Bale en una posición compleja justo cuando vuelve a los terrenos de juego tras un periodo largo de lesión.
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