
Quedan todavía tres meses para conocer el ganador, pero ya se ha filtrado una lista de 59 precandidatos a obtener el Balón de Oro 2015. El campeón del triplete, el Barcelona, acapara el mayor número de candidaturas (siete) junto al Real Madrid. No obstante, se han producido dos ausencias que molestan especialmente en el entorno del club blaugrana.
Son las de dos de los jugadores claves para el Barcelona en la temporada del segundo triplete de la historia del equipo: Sergio Busquets y Gerard Piqué. Ambos, parte de la columna vertebral blaugrana, no se encuentran en una lista que, por otra parte, incluye a jugadores de nivel inferior a priori como Luongo (Australia y QPR), Vargas (Chile y Hoffenheim), Ospina (Colombia y Arsenal), Lacazette (Francia y Lyon), Atsu (Ghana y Bournemouth), Okazaki (Japón y Leicester)...
El asunto escuece, porque tanto Busquets como Piqué han sido puntales del equipo que se llevó todos los grandes trofeos del año futbolístico. Fueron el cuarto y el séptimo en cantidad de minutos jugados, y cada uno en su faceta desempeñó un papel clave a lo largo de la temporada.
Lo que suma Busquets en el terreno de juego es casi un intangible para el Barcelona. El '5' es el ancla del equipo blaugrana, el jugador por el que fluye buena parte de las jugadas, y el primer muro de cara al ataque rival. Pocos jugadores desempeñan tan bien la función de tapón como el de Sabadell.
En el caso de Piqué, su influencia es más perceptible en el desarrollo de los partidos. Tanto en defensa como en ataque (después de los delanteros, fue el jugador con más goles), el '3' ofreció una espectacular progresión, ya que de estar en entredicho y envuelto en polémicas los primeros meses de competición, acabó con el nivel para estar entre los mejores zagueros del continente.
La presencia de jugadores en sus mismos puestos con un rendimiento inferior o de un perfil bastante secundario son otros de los argumentos que han acabado por convencer a los seguidores culés de que esta ausencia es injustificada, a su parecer. En todo caso, el desenlace de este galardón se espera positivo en Can Barça: nadie (o casi nadie) tiene dudas de que el ganador será Leo Messi.