Antes de aterrizar en el Real Madrid, los problemas ya se le iban acumulando a Rafa Benítez. Por si el recelo de la afición ante su llegada y el cariño de los jugadores a Carlo Ancelotti fueran poco, el entrenador madrileño deberá hacer frente a un problema latente en las dos últimas temporadas y que, en cierta manera, estalló hace dos semanas: la posición de Gareth Bale en el campo.
Según informa el diario Marca, hace unas dos semanas, el agente de Bale, Jonathan Barnett, se reunió con el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, así como con el director general del club y máximo aval de Benítez, José Ángel Sánchez, para trasladarles la negativa de su representado a seguir jugando por la banda derecha.
En el entorno de Bale saben que su rendimiento, aunque debatido y debatible, no se ha correspondido para la afición con lo que el jugador costó a la entidad. Por ello entienden que para ver la mejor versión del jugador, aquella que deslumbró en el Tottenham inglés, el galés tiene que jugar por la zurda y no por la derecha, como ha hecho en las últimas dos temporadas con Ancelotti.
Esta petición será el primer escollo que se encuentre Benítez en cuanto se ponga a las órdenes del equipo. Para resolverlo, tendría que replantear la posición de Cristiano Ronaldo y sacarlo de la derecha, donde ha sido el rey de la plantilla en las últimas campañas. Aunque algunas voces ven posible la reconversión del portugués en delantero y el paso de Bale a la izquierda, está por ver que el luso acepte esa posibilidad, ya que su manera de jugar le predispone a entrar por banda.
Además, esta posibilidad dejaría la duda de qué hacer con un jugador como Benzema, '9' asociativo y apuesta personal de Florentino Pérez, que con este cambio de roles vería casi imposible la titularidad. Se trata de un problema táctico que Ancelotti resolvió con la 'BBC' demostrando la complejidad de optar por otro sistema cuando no faltaba ninguno de los tres atacantes.
Resucitando a Bale