
El Real Madrid estaría dispuesto a pagar parte del sueldo de Iker Casillas en un hipotético nuevo equipo siempre y cuando renunciase al finiquito que debería percibir y que se marchase a una escuadra que no jugase la Liga de Campeones.
Es el nuevo giro que ha dado un caso que no está ni mucho menos cerrado. El Real Madrid se puso en contacto con el portero a inicios de la presente semana a través de José Ángel Sánchez, director general blanco, para preguntarle por sus intenciones de futuro.
El futbolista confirmó su deseo de quedarse y el club le comunicó que no le importa que continúe, pero que debe saber que se fichará a otro arquero para ser titular.
Es decir, desde el Bernabéu, le sugirieron que el curso que viene no jugaría, lo cual, desde el entorno de Iker, se entendió como una nueva invitación a dejar la casa blanca.
Una predisposición que no es novedosa. Ya el curso pasado el Real Madrid le abrió el camino a la despedida con dos únicas condiciones: que perdonara el finiquito global que le quedaba por percibir (entonces era una cantidad cercana a los 40 millones de euros brutos) y que no fichara por un equipo que jugara Liga de Campeones, por aquello de que Iker no jugase contra sus ex en la Champions.
El capitán se negó. Hoy esas condiciones siguen en pie, pero tienen un matiz especial.
Según informó la Cadena Cope de la mano de Paco González, director de Tiempo de Juego, los blancos estarían dispuestos a aceptar una solución 'a lo Raúl' con el guardameta, esto es, estarían dispuestos a pagarle parte del sueldo a cambio de que el jugador aceptase las otras dos condiciones, es decir, que se marchase a un equipo que no juega la Champions y que le perdonase el global del finiquito.
De esta manera, el club se aseguraría no cruzarse con el arquero en Europa y se ahorraría una cantidad considerable de dinero. Ahora mismo la libertad de Casillas cuesta unos 30 millones de euros, esto es, unos 6-7 millones de euros netos por campaña.
En Madrid estarían dispuestos a abonar la mitad de esta cifra (seis millones brutos por curso) si el resto lo asume el nuevo equipo de Iker. En el caso de Raúl se le pagó también la mitad de su salario en el Schalke a cambio de que el jugador perdonase uno de los dos años de contrato que le faltaban cumplir. En el caso del delantero no hubo prohibición de fichar por un equipo que disputase la Champions League.