El Real Madrid se presentará en el Santiago Bernabéu con nada más y nada menos que cuatro titulares fuera de juego. A Bale, Modric y Marcelo se unirá previsiblemente Benzema. Sin embargo, la baja del jugador galés es la que menos repercusión está teniendo en lo meramente deportivo, en todo lo referente a las pizarras.
Ante dos jugadores de enorme importancia en el juego como Modric y Marcelo, y otro de gran valor tanto para Cristiano (Benzema) como para asociarse con los compañeros de la medular, la ausencia de Bale no parece haber tenido tanto impacto en un equipo que siempre que ha faltado el galés ha ganado esta temporada.
Como botón de muestra, la reacción del vestuario del Atlético de Madrid a la baja de Modric y a la de Bale. Mientras que en el primer caso sí se analizaba cómo podía ampliar las posibilidades del equipo, en el de Cardiff causaba cierta indiferencia. No les hacía pensar que pudiese cambiar demasiado el paisaje del miércoles en el césped de Chamartín.
Lo cierto es que, ante el resto de sus compañeros, Bale no ofrece algo que no pueda aportar alguno de los restantes futbolistas del plantel. No pasa lo mismo con el resto de bajas. Tanto Marcelo como Modric y Benzema tienen una función concreta, un valor insustituible. La duplicidad de Bale con Cristiano influye.
Marcelo es uno de los arquitectos del Real Madrid, que en la mayoría de ocasiones comienza sus jugadas por el flanco izquierdo. El '12' no es solo un lateral, sino que la mayoría del tiempo permanece encajonado en la línea de los centrocampistas, como un volante más. Su velocidad, desborda, capacidad de llegada y de asociación le convirtieron en el socio perfecto de Isco (y ahora de James) durante meses, y acompañado en ese flanco de Cristiano, genera mucho peligro. Ni Coentrao ni Nacho (tampoco Arbeloa) se acercan a su nivel, ahora de élite mundial.
De Modric también se sabe prácticamente todo. Su baja durante cuatro meses fue la que más notó el Real Madrid a lo largo del curso. Ya es un centrocampista total que se sacrifica en lo físico, recupera balones, presiona, asiste, distribuye y llega con facilidad a zona de tres cuartos. Un cuatro por cuatro de muchos quilates. Nadie es capaz de hacer en su posición: Kroos no tiene tanto recorrido y James e Isco no pueden desempeñarse tan bien en tareas defensivas.
Por su parte, Benzema es el comodín del área. Se le reclama más efectividad de cara a portería, pero es el segundo máximo goleador del equipo. A todo esto suma esa peculiaridad tan suya de convertirse en mediapunta durante muchos ratos de los partidos, combinando con los de la medular y facilitando espacios a sus compañeros de la 'BBC'. Un '9' cuyas características le hacen casi único en toda Europa.
Todo esto es lo que pierde el Real Madrid sin estos tres hombres. ¿Qué pierde sin Bale? Evidentemente, pierde uno de los jugadores más letales, pero ante un equipo que no concede espacios y que ha sido capaz de neutralizarle sin problemas en los últimos enfrentamientos, deja la sensación de que el cambio que posibilitará su ausencia (a un 4-4-2) podría ser visto como algo a aprovechar.
Entidades
Baja dos o tres semanas