"En un partido en el Bernabéu que empezaron a pitar a Casillas, hablamos Ramos y yo de lo injusto que era, a Ramos no le gustaba". Lo decía esta madrugada Juanfran en una entrevista a El Larguero. El jugador del Atlético de Madrid trataba así de expresar su incredulidad por todo lo que rodea al capitán del Real Madrid, ese pulso que mantiene desde hace ya dos años con su propio público. Una circunstancia casi única, tratándose de un símbolo en activo.
Casillas tiene el enemigo en casa. Fuera del Bernabéu recibe elogios de todos. El '20' rojiblanco no ha sido el único en romper una lanza a su favor: Vitolo, Juanmi, Piqué...solo en la selección española ya hay varios ejemplos. El de Móstoles es una figura muy valorada, también entre la práctica totalidad de los internacionales culés.
La situación del capitán del Real Madrid y 'La Roja', con más de 15 años en el primer equipo blanco y con una trayectoria intachable en ambas escuadras, resulta inconcebible si se compara con la de otros grandes futbolistas que han pasado toda su carrera en el mismo club.
Steven Gerrard, Francesco Totti, Bastian Schweinsteiger, los ya retirados Ryan Giggs, Paul Scholes, Jamie Carragher, Carles Puyol...dejan tras de sí casos de absoluta devoción por parte de la hinchada. En el caso de Gerrard, a pesar de que haya decidido terminar su carrera en la MLS estadounidense, en Los Angeles Galaxy.
El eterno rival tiene varios casos, como los de Leo Messi, Andrés Iniesta o Xavi Hernández. En este último caso, a pesar de las dudas del jugador de quedarse este último verano, sigue siendo uno de los preferidos de la afición. Al igual que Casillas en el Real Madrid, ha sido uno de los máximos responsables de los éxitos del equipo en la última década, pero el trato es claramente diferente.
Incluso los que no tienen un pasado plenamente vinculado a su club actual pero sí llevan mucho tiempo en él se extrañan de lo ocurrido con Casillas. Buffón, uno de sus rivales por el cetro de la portería mundial durante años, era explícito cuando se le preguntaba por ello: "Su situación me habría tocado las pelotas". Víctor Valdés, al otro lado del puente aéreo, contó con todo el apoyo de la grada del Camp Nou a pesar de que anunciaba su intención de no renovar y marcharse a otro equipo.
Así, mientras en otros lugares se sigue venerando a estos raros especímenes que son los jugadores que guardan lealtad a un equipo durante un periodo diferencial de su carrera, en el Santiago Bernabéu Iker Casillas sigue sometido a un juicio sumario diario en el que tan pronto es ganador como perdedor. El mostoleño tiene el enemigo en casa.
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