El Real Madrid ha protagonizado un mes inusual, repleto de pinchazos y en el que ha completado la pérdida de brillo que lucía en los meses de octubre y noviembre. Los tres tropiezos en Liga lo reflejan; también el bajón sufrido en alguno de sus jugadores. Incluido Isco. El malagueño no ha conseguido ser el futbolista determinante de otros partidos.
Ha sido el clavo ardiendo al que se ha agarrado el equipo cuando el juego no era el mejor. De hecho, destacó en el Veltins Arena junto a Marcelo, y por él fluye buena parte del fútbol del equipo. Pero Isco comienza a dar síntomas de ligero cansancio, físico y mental. No existe tanta frescura. En los últimos encuentros ligueros sufre una serie de baches periódicos, una irregularidad que aleja al '23' de la versión casi perfecta de hace meses.
Desde 2015 en Liga, Isco ha sumado tres partidos en los que ha superado las 10 pérdidas de balón. Combinando los duelos contra Athletic (15), Deportivo de la Coruña (12) y Real Sociedad (15), acumula 42 en total. También ha tenido bajones en las recuperaciones, algo que casa con el esfuerzo de los últimos meses, con esa sensación de falta de frescura: tan solo tres balones ganados al rival en los partidos ante Elche, Valencia y Atlético.
En la mayoría de choques en los que el rival ha superado al Real Madrid, el equipo blanco ha notado el bajón del malagueño en alguna de las facetas. Por ejemplo, ante el Athletic acumuló el mayor número de pérdidas de balón en lo que va de año, y en las derrotas ante Valencia y Atlético tuvo su dato más bajo de 2015 en lo referente a recuperaciones (3). En San Mamés, se echó mucho en falta su habilidad para romper líneas rivales con pases a ras de suelo.
Se percibe cómo los registros de Isco se van empeorando muy poco a poco, pero su estado de forma en meses anteriores hace que el balance con 2014 sea muy similar. En 2015, promedia 5,8 recuperaciones y 8,3 balones perdidos, mientras que en los meses de 2014 los datos fueron de 5 recuperaciones y 8,8 balones perdidos por partido. Escasas diferencias, pero la tendencia es algo negativa.
Pesan los minutos. Isco ha sido titular en 27 de los últimos 30 partidos de la temporada, y es ya el séptimo jugador con más minutos de toda la plantilla, con un total de 2.708. Isco sigue siendo uno de los principales apoyos de Ancelotti en el césped, pero empieza a mostrar su lado más humano.
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