
Luis Enrique ha comparecido en sala de prensa este viernes en la previa del duelo que medirá al Barça y al Málaga. Su intervención, sin embargo, apenas ha girado sobre el equipo malacitano y sí sobre Leo Messi. El argentino contradijo de forma soterrada ayer a su entrenador al afirmar que la derrota en Anoeta sí que supuso un antes y un después con respecto al arranque de campaña. Dice la Pulga que desde aquel partido el equipo se enchufó y empezó a a mostrar mucha más actitud, esto es, todo lo contrario a lo que el técnico había defendido. Esta afirmación parece no haber gustado demasiado a Luis Enrique. Al preparador se le ha preguntado en cuatro ocasiones por este asunto y sólo ha respondido en una de ellas.
"No tengo por qué cambiar de opinión. Yo creo que es el proceso y evolución de una temporada, ni más ni menos", dijo en la primera de las dudas planteadas. Luego llegó la segunda y ahí Luis Enrique anunció que no hablaría más del tema.
"No voy a entrar. No me interesan las polémicas. A lo largo de la temporada, trabajamos algunos aspectos. El que lo piense así, bien. Yo que soy el que está en este cargo, os doy mi opinión. La que yo considero que es la real. Si alguno cree que es de otra manera, fantástico", sentenció.
El problema para el entrenador es que hubo dos cuestiones (además consecutivas) a este respecto. Su gesto mutó. Más sonriente y bromista que de costumbre, el entrenador en este asunto se mantuvo hierático. "¿Por qué te irrita hablar de este tema?", le cuestionó un redactor de Radio Marca, Luis Enrique respondió con el silencio y una larga mirada.
Luego le tocó el turno a David Bernabéu, de Cuatro. "¿No me irás a hacer la cuarta pregunta por el mismo tema?", le retó Luis Enrique. "Pues sí que va a haber cuarta duda", replicó Bernabéu. "Ahórratelo, chico, sé inteligente", comentó con tono irónico Luis Enrique.
El periodista hizo la pregunta, pero Luis Enrique no la respondió. De nuevo mirada fija y silencio. "Gracias por la respuesta", comentó Bernabéu ante esta actitud. "Magnífica reflexión", aderezó de nuevo irónico Luis Enrique.