
Víctor Valdés apura sus últimos días en el Barcelona. Aunque no ha podido despedirse en el campo debido a su grave lesión de rodilla, el portero de Hospitalet d' Llobregat ha querido dejar un último mensaje al barcelonismo antes de marcharse a Alemania para tratarse de su dolencia.
El portero lo ha hecho a través de una emotiva carta que ha publicado en la página web del club. Una dedicatoria en la que ha querido agradecer a todos los miembros del club que han seguido de cerca su trayectoria. Todos, salvo uno, porque Valdés ha pasado por alto al 'Tata' Martino.
El cancerbero ha dedicado un pequeño párrafo a los técnicos que le han entrenado en el primer equipo. Desde Louis Van Gaal hasta Tito Vilanova, pasando por Rijkaard y Pep Guardiola. Sin embargo, el entrenador de Rosario no aparece en la misiva.
Relación en entredicho
Esta ausencia en la carta de Víctor Valdés podría confirmar las sospechas que apuntan a que la relación del entrenador con su plantilla no es la más fluida. Los jugadores no creerían en el técnico argentino, al que no verían con las ideas suficientes para afrontar un reto de tal magnitud como es el banquillo del Cam Nou.
La idea del 'Tata' de fomentar un fútbol algo más directo, que dejase de priorizar el toque y toque en según qué escenarios no ha terminado de convencer a un grupo que ya ha tenido sus más y sus menos con él. Futbolistas como Tello, Alexis o Xavi son algunos de los ejemplos. Y Víctor Valdés añade uno más a la lista con su olvido en la carta de despedida al club de sus amores.
La carta íntegra de Víctor Valdés:
"Llega el momento de decir adiós, de despedirme de todos vosotros.
Por desgracia, no he podido despedirme jugando al fútbol como me hubiese gustado, pero así es la vida a veces y este año ha sido cruel conmigo en ese sentido.
He tenido tiempo para repasar de dónde vengo y en qué me he convertido. Solo aparece en mis pensamientos nostalgia hacia las personas que me han ayudado a llegar hasta aquí. A ellos quiero dedicarles esta carta.
A Oriol Tort, a José Antonio Pozanco, a Juan Manuel Asensi, a Ursicinio López, a Albert Benaiges, a Antonio Olmo, a Juan Carlos Pérez Rojo, a Pep Segura, a Quique Costas, a Joan Vilà, a Jordi Castel... Los maestros deportivos que hicieron de mí, el deportista que siempre soñé ser. Personas que consiguieron formar un niño de diez años en un portero que defendiera la portería del Camp Nou, diez años después. ¡Gracias a todos!
Gracias a Louis Van Gaal, por demostrar tener el valor necesario para apostar por el talento que solo sus ojos saben ver. Él inició la construcción de un Barça histórico, del que he tenido el privilegio de formar parte. Gracias de corazón.
Gracias a Frank Rijkaard, por darme la confianza necesaria y permitirme alcanzar la gloria, tocando la Copa de Europa en París con mis propias manos. Allí donde estés, te repito, mi vida estará siempre en deuda contigo, Míster.
Gràcies Pep, por haberme abierto la puerta para jugar a un juego que desconocía, por haber sido mi guía durante el camino que uno debe seguir buscando el éxito, y lo encontramos juntos, ¿verdad? Sempre ens quedarà això Míster, i creu-me, será etern!
Gràcies Tito! Allí donde estés, te doy las gracias por habernos enseñado no solo el camino para seguir ganando como equipo, sino también la fuerza y el carácter necesarios para afrontar la vida.
Gracias a todos aquellos compañeros con los que he tenido el placer de compartir el trabajo que supone llevar ese escudo en el pecho día tras día, por haberme hecho sentir importante dentro de este grupo que hemos formado durante todos estos años. Porque todo se reduce a ello, somos nosotros, aquí y ahora. ¡Gracias Señores!
Y por supuesto no quiero olvidarme de las personas más importantes para mí, de estos doce años como profesional vistiendo esta camiseta, mis fieles seguidores. Aquellas personas que pasara lo que pasara, estabais ahí siempre para darme el aliento que un luchador necesita en todo momento, estabais ahí orgullosos de verme en cada celebración, apoyando en cada partido, enviando esa energía positiva que nunca deje de notar, la que me llevó en volandas durante todo este tiempo, porque sin eso, yo no hubiese sido capaz de hacerlo solo.
Gracias, gracias y mil veces gracias. Y os pido por favor que no dejéis de apoyarme.
Per sempre, FORÇA BARÇA!"