Neymar es una máquina de crear dinero. Ídolo de masas en Brasil y buena parte de Latinoamérica, su fichaje por el Barça no ha hecho más que disparar su tirón comercial. El chico, vaya, es una mina. Tanto que es capaz de convertir en oro todo lo que toca. Aunque lo que toque sea una incorrección lingüistica. Da igual. Si lo dice o lo hace Neymar bueno será.
¿A qué nos estamos refiriendo? Vayamos por partes.
Si estuvieron atentos a la presentación de Neymar el pasado lunes en el Camp Nou, lo verían hacer un gesto algo infrecuente. Consistía en colocarse el puño de un brazo a media altura del otro para simular una especie de 'T' mayúscula.
Sus amigos (Neymar se llevó a seis hasta la Ciudad Condal) posaron en múltiples fotos haciendo el mismo gesto y luciendo una camiseta del Barça en la que no se leía nada de Neymar o similar, sino la palabra 'Toiss' con el número 11, el dorsal que el brasileño portaba en el Santos.
Pues bien, el gesto en cuestión de la 'T' pretende evocar a esa palabra, 'Toiss' que en brasileño vulgar vendría a decir algo así como "Es nosotros" (E nois en brasileño común). Esta fórmula, la de 'Toiss' es una incorrección gramatical. Un vulgarismo. Una patada al diccionario de portugués.
Es como si en español se quitase una 'h' al verbo hacer o decidiésemos escribir con 'v' lo que se debe escribir con 'b'. Una aberración lingüística. Sin embargo, en el caso de Neymar, lo que debería ser un error, se ha convertido en un negocio. El brasileño suele hacer este gesto cuando celebra un gol con el que quiere reinvidicarse. Es su forma de decir "Aquí estoy yo" o algo similar.
Así, a fuerza de repetirlo, la palabra se ha convertido en un icono comercial. Tanto que la compañía deportiva que patrocina al jugador ya ha editado camisetas con estos gestos y en Barcelona ya se empiezan a ver camisetas que imitan el famoso nombre que llevaban sus colegas en la zamarra.
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