Ángel Di María fue uno de los protagonistas de la victoria (1-3) del Real Madrid ante el FC Barcelona en la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey. El argentino fue uno de los hombres que más trabajó en defensa y sus regates se dejaron notar también en ataque. Que se lo pregunten a Puyol.
El capitán culé sufrió la peor parte de este gran choque del 'fideo'. Un castigo que alcanzó su cénit en la segunda parte cuando Di María lo encaró antes de que CR7 marcase el segundo gol del Real Madrid.
Con dos amagos, el extremo sentó al defensa y lo dejó, literalmente, en el suelo. Su disparo lo despejó Pinto, pero lo aprovechó el luso para marcar un tanto que sentenciaba el partido.
Barça 1-3 R.Madrid
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